Los pequeños y medianos empresarios afectados por los impagos de grandes astilleros del sector naval y agrupados en una plataforma -muchos de los cuales son de Moaña- serán recibidos mañana por un representante del Instituto Galego de Promoción Económica (IGAPE). Ese fue el compromiso adquirido ayer por el conselleiro de Industria, Francisco Conde, en el pleno del Parlamento gallego, tras responder a unas preguntas planteadas sobre este asunto por el BNG. A la sesión plenaria asistieron representantes de estos empresarios invitados por los nacionalistas. Acudieron con el edil de Moaña, Odilo Barreiro.

El diputado nacionalista Luís Bará, explicó al conselleiro la situación que sufren estos empresarios por los impagos, con riesgo de embargos y el despido de sus trabajadores. Le exigió que les reciba para escuchar estos problemas "e tratar de plantexarlle unha solución. Pedimos que as portas da Xunta deixen de estar pechadas", indicó en referencia a que los integrantes de la plataforma de afectados solicitan reuniones con la Consellería de Industria, sin éxito, desde el año 2017. Conde aseguró que desconocía los detalles del problema y emplazó a esta reunión con el IGAPE antes de estudiar las posibles soluciones.

El debate parlamentario llevó a Bará a acusar a la Xunta de "ir da man de empresas grandes como Ence, e non apoiar a compañías máis pequenas como estas, que son as que mantiveron o emprego nos momentos máis difíciles". El nacionalista aseguró que empresas como las de esta plataforma, que quedaron económicamente muy dañadas, ponen en cuestión "o discurso da Xunta da recuperación do naval".

El portavoz de la plataforma de afectados, Balbino Barcia, explicó tras la sesión en O Hórreo que ayer mismo, por la mañana, lo habían llamado desde el IGAPE. Le concertaron una cita para mañana, viernes 29 de marzo, en la sede de esta entidad en la Praza da Estrela de Vigo.

Balbino Barcia se mostró sorprendido por el hecho de que el conselleiro de Industria asegurase desconocer su problema "cando falamos con representantes da Xunta hai varios meses na sede de Vigo". De toda formas, espera que la reunión de mañana sirva par desatascar la situación. "Tratarei de explicar que existen recursos para axudarnos, pois os estaleiros que nos deben facturas están a recibir cartos públicos".

La plataforma de afectados está integrada por 12 empresarios a los que las firmas para las que trabajaban dejaron de abonarles facturas por un importe de 5,5 millones de euros. Llevan desde hace ocho años luchando por cobrar tanto por vía judicial como recurriendo a las administraciones.

Por parte del BNG, Odilo Barreiro deseó que la Xunta "non lles dea agora largas ata as eleccións" y considera que se da por satisfecho "se a presión feita no Parlamento serve para que se busque unha solución ao problema".

Tras la sesión, desde la oficina parlamentaria del grupo nacionalista emitieron un comunicado describiendo la situación de estos empresarios como "drama social" y criticando la supuesta "falta de compromiso da Xunta coas empresas e as persoas autónomas afectadas ante un conselleiro de Industria que evitou pronunciarse sobre as propostas formuladas polo Bloque para darlle unha solución a esta situación".