La presencia de animales sueltos vuelve a provocar un accidente en las carreteras de O Morrazo, un problema que se suma al maltrato de caballos a los que se limita su movilidad colocando artefactos como trancas en sus patas delanteras. Ayer, un motorista de Moaña resultó herido tras sufrir un fuerte choque con su motocicleta contra una manada de estos caballos en la carretera general PO-313.

Los hechos ocurrieron alrededor de las seis de la mañana, cuando el motorista circulaba en dirección Moaña-Marín para ir a trabajar. En el entorno del cruce hacia el Lago de Castiñeiras, en la zona de Cruz da Maceira, fue en donde el herido se encontró con la manada. Eran siete caballos y dos potros que cruzaban la carretera general ocupando en ese momento los dos carriles.

El herido, el vecino de la villa Alfonso Pino, explica que se trata de un tramo sin iluminación viaria y todavía era de noche. "Cuando vi los caballos ya los tenía encima. No había ni espacio para esquivarlos pues estaban en los dos carriles. Solo frené todo lo que pude y salí volando tras el impacto", recuerda.

Sufrió distintos daños en el pecho, en la espalda, en una pierna y una fisura en un dedo, como consecuencia de la caída. Tuvo que ser atendido por una ambulancia del 061 y trasladado al hospital Fátima de Vigo. Hasta la zona se desplazaron también efectivos de la Guardia Civil de Tráfico.

Una vez fuera del hospital, el herido regresó a la zona para tratar de fotografiar a los caballos y demostrar así que fueron los responsables del accidente. Toda la manada estaba ya en un terreno forestal cerca de la calzada. Sus fotografías determinaron que los caballos llevaban trancas en las patas, un problema que se repite varias veces por semana en los últimos meses en los montes del municipio moañés.

La motocicleta acabó prácticamente destrozada, para enfado del conductor, que teme que la Administración no se haga cargo de lo sucedido y del gasto ocasionado, sobre todo al saber que este tipo de caballos no suele llevar chip y es muy difícil localizar a sus dueños. El conductor, además, tuvo que regresar al hospital a primera hora de la tarde con dolor por las heridas sufridas.

El problema se repite

Hace poco más de una semana un vecino de Aldán también sufrió un accidente en su coche cuando un jabalí saltó contra el vehículo en el ramal de entrada al Corredor do Morrazo desde la rotonda de San Martiño. Además, recientemente agentes de la Policía Local de Moaña tuvieron que acudir en varias ocasiones al Corredor a retirar caballos del arcén. Los equinos estaban también inmovilizados parcialmente.

Este mismo martes, tras avisos de senderistas, la Policía localizó a tres caballos con trancas en la subida a Chan da Arquiña desde Domaio. Solo unos días antes se localizó a toda una manada también en Domaio, sometida a este tipo de maltrato animal. La dificultad para dar con los dueños hace que estas situaciones suelan quedar impunes. La asociación animalista Libera registró, desde 2011, más de 300 caballos con estos artefactos.