Los bateeiros con su base en el muelle de Domaio se reunieron ayer y acordaron iniciar una campaña de recogida de firmas entre los vecinos para aumentar la presión a Portos de Galicia con el objetivo de conseguir las necesarias mejoras en el muelle.

La principal demanda a medio plazo es la de un dique de abrigo, pues el muelle está totalmente a merced del oleaje y los días de mal tiempo los 15 balandros de Domaio deben quedar abarloados en el muelle de San Adrián (Vilaboa).

A corto plazo, exigen a Portos la reparación de distintos desperfectos que dificultan el trabajo del sector mejillonero e incluso implican un riesgo de caídas o lesiones. A comienzos de este mismo mes los bateeiros denunciaron problemas como las anillas metálicas rotas e incluso una escalera para subir a la dársena, de madera y metal, en peligro de caída.

Además, el firme del muelle está agrietado y varias piedras de la rampa o de las esquinas están desprendidas o amenazan con desprenderse.

De momento no recibieron respuesta de la Xunta, pese a que el inspector de Portos recogió sus demandas. Hace varios años que cuentan con la promesa de la Consellería do Mar de estudiar un dragado para construir un abrigo, pero tampoco hay novedades en ese aspecto. De ahí que recurran a una recogida de firmas para hacer oír sus demandas.