Agentes de la Policía Local de Moaña retiraron ayer por la mañana, pasadas las 11.00 horas, un caballo del Corredor do Morrazo que pastaba en un arcén, con el riesgo de que accediese a la calzada y ocasionase un accidente. Tras el aviso de una conductora, los agentes llegaron a la zona y descubrieron que el caballo de monte tenía las patas delanteras atadas, en un nuevo caso de este tipo de maltrato animal que se repite cada poco tiempo en los montes moañeses. La propia conductora que dio el aviso esperó a que llegaran los agentes para evitar que el animal entrase en los carriles y provocase un accidente de tráfico.
El caballo se encontraba cerca del carril en dirección a Vigo, al lado de la salida de Meira. Fue retirado hacia el monte por los agentes que dieron también el aviso a Seprona, para investigar lo sucedido y tratar de determinar la identidad del dueño del equino para tramitar la denuncia por maltrato.
En enero, en solo una semana los agentes de la Policía Local localizaron cuatro caballos de monte con trancas o las patas atadas. Con la ayuda de la Guardia Civil tratan de estrechar el cerco al dueño de los animales. El acceso de Meira, por su parte, es en el que más casos de caballos entrando en el Corredor se producen. El paso canadiense instalado en su día no cubre todo el ancho de la calzada.
