La mejora de la red separativa de pluviales y de fecales es fundamental en Moaña para el buen funcionamiento de la depuradora, que ayer volvió a provocar un alivio de vertidos en Samertolaméu, debido al mayor aporte de aguas que recibe por la lluvia. Este alivio de fecales es una de la causas de que haya picos de contaminación en Moaña como los del año pasado, que a punto estuvieron de costarle el banco de trabajo a las mariscadoras.

El vertido de ayer provocó varias llamadas de vecinos al Concello. El concejal de Medio Ambiente asegura que Aqualia le confirmó que fueron 10 minutos que coincidieron con una tromba de agua pero no generó alerta del Instituto para el control del medio marino (Intecmar), que tampoco remitió nada en los últimos meses. Recuerda que desde el Concello ya acometieron la separación de pluviales en los caminos do Caño, A Bouza, Miranda y Tirán, pero que aún así no llega y la depuradora sigue recibiendo demasiado aporte cuando llueve. Recuerda que el aliviadero de Samertolaméu lo hizo Augas de Galicia cuando se construyó la depuradora de Moaña, con un fallo de diseño que ha heredeado el Concello. Pese a todo dice que ellos están trabajando para que esos alivios sean los menos posibles.

Respecto al sistema telemático de control que el Concello había anunciado para conocer los alivios de la depuradora en tiempo real, a través de una alerta en el móvil, el concejal asegura que está instalado pero pendiente de calibrar.

En cuanto a las inversiones de Augas de Galicia, Barreiro explica que el abastecimiento y el saneamiento son competencias municipales y que Augas de Galicia colabora con altas inversiones que financia con lo que cobra por el canon de saneamiento a todos los vecinos. En este sentido, cree que ese canon, que ahora se reparte supuestamente con un critero de solidaridad, debería de revertir en proporción a lo que aporta cada concello. En el caso de Moaña, son 200.000 euros que aporta al año por dicho canon.