El resultado de la reunión que mantuvieron este jueves los representantes del bipartito, las asociaciones de la mesa de diálogo, el jefe territorial de Costas y la delegada de Patrimonio, con respecto a la continuidad del paseo de Seara, satisface al PP de la villa, que descartó participar en dicha mesa. El portavoz del PP, José Fervenza, celebra que Costas y Patrimonio "avalen que la senda continúe por el frente marítimo". Asegura que "el tiempo me ha dado la razón en cuanto a mis reclamaciones sobre ese paseo", aunque aprovecha para criticar al bipartito por "no mover ficha desde que se paralizaron las obras hace ya tres años".

Fervenza vuelve a cargar contra el gobierno local asegurando que detrás de la intención del cambio de trazado "se escondía una política de amiguetes. Lo hicieron para salvar a cuatro amigos y condenaron al resto de vecinos a convivir con un paseo completado a trozos e inservible". Se muestra confiado en que este retraso en solucionar la continuidad del paseo de Seara, con dos tramos paralizados, le pasará factura a la alcaldesa, Leticia Santos, "en las urnas en el mes de mayo".

Para Fervenza, que Costas y Patrimonio pidan la continuidad del paseo marítimo por el frente litoral supone un zasca en toda regla" al bipartito. Asegura no entender por qué el paseo estuvo varios años "hipotecado" y defiende que la regidora "conoce las razones aunque no se atreva a contarlas públicamente".

De todas formas, valora que "finalmente se haya impuesto la cordura y la razón sobre el despropósito y, mal que le pese, el paseo se hará por la costa".

Finalmente Costas y Patrimonio apostaron por un proyecto basado en la opción B de las propuestas planteadas por los arquitectos de la mesa de diálogo: Óscar Fuertes y Iago Fernández. El proyecto final debe completar el paseo por el frente litoral, pero discurrir a un nivel distinto que el de los astilleros tradicionales de Casqueiro y Carlagho, para permitir la conexión al mar de ambas estructuras, tal y como obliga Patrimonio.

Fervenza defiende que el PP "siempre estuvo del lado de las demandas de los vecinos y apostamos por el proyecto original en contra de la cacicada que pretendían los nacionalistas con la complicidad del PSOE". Sin embargo, la propia Dirección Xeral de Patrimonio Cultural dejó claro que el proyecto original no cumple con la protección de los astilleros, pues no permitiría el acceso al mar desde los mismos a través de sus anguilas.