El último pleno del año en Moaña comenzó con la renuncia de la edil del PP, Estela Santomé. Sorprendentemente su renuncia se produjo al comienzo de la sesión, y no en el último punto, como suele ser habitual. Tanto Marta Freire (PSOE), como Odilo Barreiro (BNG) y Javier Carro (XM) agradecieron su "talante" en su papel en la oposición y la definieron como una persona "afable e próxima". Su compañero de grupo José Fervenza (PP) le agradeció el "traballo en equipo e o respecto mutuo" y le deseó suerte en la presidencia del CD Moaña. La propia Santomé dejó clara su trayectoria en la directiva del club de fútbol para evitar sospechas de su ascenso a la presidencia debido a la política. Reconoció la "dificultad" de la renuncia pero señaló que "todo acaba y nadie es imprescindible", para abandonar la sala entre aplausos y besos de despedida de sus compañeros.

La sesión acabó con el acuerdo unánime en la moción presentada por BNG, PSOE y XM para exigir a Portos de Galicia la firma inmediata del convenio que permitirá al Concello acabar el paseo marítimo de Domaio. El bipartito denuncia el retraso en la firma porque "non goberna en Moaña o mesmo partido que na Xunta". Se trataría de 200 metros de terreno que extendería la senda actual entre el club de jubilados y el muelle de bateeiros, para lo que Moaña empleará 100.000 euros del Plan Concellos. Al final el PP votó también a favor aunque no entró en debate al respecto.

También hubo unanimidad en la moción para exigir a la Xunta medidas que corrijan los problemas en la recogida de aguas del Corredor, que generan inundaciones durante los temporales de lluvia.

En donde no hubo buen entendimiento, ni mucho menos, fue en la petición de reprobación de la alcaldesa, Leticia Santos, que solicitó el PP. El portavoz del principal grupo de la oposición, José Fervenza, acuso a la regidora de "deixadez de funcións" por la pérdida de una subvención provincial para contratar a tres becarios. "Poderíase solicitar a reprobación por moitas cousas como os vertidos no río Rialdarca, o retraso na xestión do centro de saúde ou porque Moaña amanecese un día cheo de lazos amarillos. Pero este asunto nos parece un escándalo, sobre todo porque a Secretaría advirte das graves carencias de personal e porque catro persoas quedaron sen un contrato".

Desde el BNG, Odilo Barreiro relató todas las subvenciones solicitadas en el presente mandato y aseguró que gracias "á boa xestión económica" se pudieron realizar otras contrataciones. Alegó también que toda las personas destinatarias del programa de becas de la Diputación "traballaron noutros concellos. Ninguén quedou sen traballo polo retraso de Moaña". La propia alcaldesa asumió el "error" y señaló que no culparía al personal del Concello por solicitar tarde esa ayuda. Desde el XM, Javier Carro votó en contra de la reprobación "porque en comisión, o 13 de novembro, solicitei explicacións e se me deron".

El debate subió de tensión después de que el nacionalista Odilo Barreiro asegurase que la petición de reprobación que defendía Fervenza tenía "un tufillo machista. Porque lle doe ter perdido a Alcaldía a mans dunha muller máis xoven e preparada que el".

Esto fue duramente criticado por el propio Fervenza quien pidió "respecto e que non se amparen no machismo para confundir. A xente de Moaña non é parva e sabe que nunca me metín con ninguén nese sentido. Non me parece xeito de tratar a un compañeiro de Corporación", concluyó en el momento más tenso de la noche.

La sesión sirvió también para que todos los grupos aprobaran la moción del PP pidiéndole a la Diputación la mejora de aceras e iluminación en la carretera provincial de Meira.