Gestión, corazón, confianza, optimismo, trabajo, dignidad, respeto, sonrisa, fortaleza, ilusión, futuro... El BNG eligió la víspera de Nochebuena para proclamar oficialmente a Félix Juncal como aspirante a ocupar la Alcaldía de Bueu por cuarto mandato consecutivo y el candidato aprovechó ese espíritu navideño para apelar a su gestión "transformadora" del municipio y a su saneamiento económico, pero también al sacrificio e ilusión renovados, al trabajo personal y colectivo, a la suma de experiencia y juventud en aras del bien público como argumentos de peso para apuntalar la confianza de su pueblo y servir de modelo para acercarse al poder en Galicia. "O mellor está por vir, o mellor está por chegar", prometió al final de su discurso en el Centro Social do Mar, ante un auditorio entregado y con la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, ocupando la primera fila entre otros cargos de la formación nacionalista.

"É difícil chegar, pero tamén manterse. Hai que conectar con quen xa te coñece e tamén coas novas xeracións, ser representante da maioría social", señalaba un veterano analista con experiencia en lides políticas poco antes de que Juncal subiera al estrado invitado por Pontón, que lo presentó como persona "intelixente, comprometida co seu pobo, que é Bueu, e co seu país, que é Galiza, e capacitado" para seguir avanzando. "Van pasando os anos, pero as ilusións seguen intactas", comenzó el candidato, que atribuyó esa "enerxía" al respaldo ciudadano, que le sirve para afrontar el futuro con optimismo.

"Síntome moi emocionado e tan nervioso como as primeiras veces que me dirixín ao pobo de Bueu para pedirlle a súa confianza", aseguró con tono solemne e interrumpido con aplausos. Añadió que la política o se ejerce desde la pasión y la vocación de servicio público o por otros motivos espurios a los que el BNG reniega. "O noso é un discurso sincero, transparente, cun proxecto que queremos levar a cabo en Bueu pero tamén no noso país, que é Galiza e que necesita un respiro" a través de una fuerza política propia y con poder en todas las instituciones.

Para merecer ese objetivo, el BNG presenta el aval de "antepoñer as necesidades dos cidadáns ás políticas partidistas", que son legítimas pero deben estar supeditadas a aquéllos. Y tener vocación de servicio: "Sendo pequeno xa tiña ilusión de ser alcalde do meu pobo. Cumprín ese soño e foi grazas a vós", volvió a agradecer entre aplausos, y atribuyó al "corazón e a paixón compartidas, a humanidade, que parece fóra de moda", los éxitos logrados y que seguirán guiando sus actuaciones.

Entre ese bagaje, Félix Juncal destaca haber recuperado la sonrisa de un pueblo que "hai 12 anos estaba absolutamente deprimido" y miraba a los concellos vecinos "con envexa", así como el orgullo y dignidad colectivos. "Bueu estaba en parada cardíaca e tivemos que facer política de reanimación", ilustró, aunque reconoció que también ha pasado momentos delicados, que "sufre" cuando no puede resolver un problema, que ha tenido que hacer renuncias personales y familiares para entregarse a la alcaldía y que se "sobrevive cando o pobo está ao lado e lle dá fortaleza". "Se sigo contando coa vosa confianza e o voso apoio, comprométome a seguir exercendo con dignidade e respeto escrupuloso á vontade do pobo e determinación para seguir soñando xuntos", proclamó.