Los trabajos de jardinería en la Alameda Nueva de Cangas finalizaron con la poda y corte de 15 palmeras que estaban afectadas por el picudo rojo, de las 31 que había. Diez de ellas fueron taladas totalmente, mientras que en la otras queda solo el tronco, porque a ellas está sujeto el alumbrado de Navidad de este año, porque de otra manera también habría desaparecido del paisaje de una Alameda Nueva asolada por la limpieza que se llevó a cabo. Desde la Concejalía de Obras y Servicios del Concello de Cangas que dirige Mercedes Giráldez se asegura que una vez retirado el alumbrado de Navidad también desaparecerá el tronco de las citadas palmeras.

Cambio total

Estos trabajos de poda se enmarcan dentro de los encargados por la Concejalía de Obras y Servicios para acabar con el picudo rojo y sanear también las especies arbóreas, con la retirada de muchas ramas que suponían un verdadero peligro. De hecho, según los técnicos municipales, el temporal de viento de la madrugada del jueves hubiese tirado más ramas, con el consiguiente peligro para la población. Ahora los trabajos de poda se centran en la avenida de Marín.

En la actuación de las palmeras, además de la tala, también se contemplaba un tratamiento a las que están sanas para impedir que la plaga del picudo rojo prospere de la forma en la que lo hizo.

Se echó de menos una actuación más contundente al principio, cuando ya se apreciaba la presencia de la plaga no solo en las palmeras de la Alameda Nueva, sino también en los jardines de Félix Soage.

La intervención realizada cambió la fisonomía de la Alameda Nueva o Jardines de O Sinal. Pero tampoco pareció preocupar mucho a la ciudadanía el hecho de que se tuviesen que talar nada más y nada menos que quince palmeras, la mitad de las que estaban plantadas en la Alameda Nueva, que fue obra del exalcalde socialista de Cangas Lois Pena.