Los 10.000 vehículos que circulan de media cada día por el tramo en obras de la futura autovía de O Morrazo recuperaron desde ayer el trazado del Corredor que se está desdoblando en la zona de O Meixueiro. Tras horas de intenso trabajo, pasadas las 19.00 horas quedó totalmente inoperativo el vial alternativo abierto a comienzos de abril y que permitió el paso de los coches durante siete meses mientras se ejecutaba el mayor desmonte de la obra de desdoblamiento. Gracias a esta carretera de 700 metros de largo, con un carril para cada sentido, y limitada a 40 kilómetros por hora, no fue necesario cortar de forma permanente el Corredor para construir el tercer y último subtramo de la autovía, cuya finalización está prevista para mayo de 2019.
Con la intención de no causar retenciones en las horas puntas, hasta media mañana los trabajos de adecuación del trazado del Corredor en O Meixueiro no afectaron a la circulación. Sobre las 11.00 horas se empezó a cortar un carril del desvío, dando tráfico alternativo, mientras los operarios de la empresa constructora aceleraban el fresado y asfaltado. A las 15.00 horas el carril en dirección a Cangas estaba ya operativo en el antiguo trazado.
A última hora de la tarde, entró en servicio el trazado antiguo también en dirección a Domaio, aunque la finalización del asfaltado obligó también a mantener una circulación alternativa hasta el final de la jornada laboral, con retenciones de unos minutos en ambos sentidos.
Desde la empresa, -la UTE formada por Covsa y Taboada y Ramos- explican que el trabajo se prolongó durante horas porque fue necesario fresar las cuñas de acceso al desvío y después extender el nuevo aglomerado para dejar todo el trazado con el mismo nivel.
Al desvío -con una plataforma de diez metros y carriles de 3,5 en cada sentido- le espera una demolición, pues, cumplido su objetivo temporal, tratará de recuperarse el estado anterior del entorno. Para ello se reconstruirá el vial entre Berducedo y A Fraga, que cruza con un paso elevado el Corredor y que se cortó debido a esta carretera temporal.
Por otro lado, la intensa actividad constructiva estaba ayer centrada también en el segundo viaducto de A Fraga. Y es que se hormigonó el tercer vano con la extensión de 110 metros cúbicos de hormigón, tras la colocación de las dos vigas la pasada semana y la estructura metálica con 20.000 toneladas de ferralla.
Se espera que el viernes lleguen las dos vigas del cuarto vano, que se lanzarían el lunes, llegando la próxima semana a la mitad de la plataforma del viaducto, justo a la altura sobre el curso de agua de A Fraga.
Carretera a Marín
Por otro lado, los desvíos en la PO-313 que deben acometer a la altura de Broullón los conductores que circulen por esta carretera general entre Marín y Moaña todavía no tienen fecha de finalización. La ampliación del paso inferior obligó a este corte en septiembre. Los trabajos son complejos, al seguir la circulación por el Corredor, y obligan a grandes precauciones. De ahí que se vayan a prolongar los próximos meses.
