El gobierno local de Cangas vio en la presencia del conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, en un acto organizado por el Partido Popular, un clara provocación, una total falta de respeto institucional y de ética. Y es que su estancia en la villa tenía lugar después de múltiples peticiones inútiles por parte del alcalde, Xosé Manuel Pazos (ACE) y de demás miembros del tripartito para mantener una entrevista con el conselleiro. Sus peticiones nunca fueron atendidas, aunque él aseguró después en su intervención, en este ciclo de conferencias que organiza el PP y que comenzaba ayer, que se había hablado en varias ocasiones con los portavoces del gobierno y que la entrevista con el alcalde Xosé Manuel Pazos había sido aplazada como consecuencia de la operación a la que fue sometido.

Pasadas ya las 19.00 horas, esperaban la llegada del conselleiro de Sanidade al hotel Airiños la alcaldesa accidental y otros miembros del gobierno tripartito con el propósito de entregarle un escrito con una solicitud para una nueva entrevista, cosa que consiguieron con normalidad ya dentro de la sala de reuniones del hotel. Pero no solo eran los políticos los que esperaban la llegada del conselleiro de Sanidade, Vázquez Almuiña. También lo hacía un grupo de trabajadores de ambulancias, armados con pancartas, silbatos y megafonía, que querían hablar con el conselleiro. Cuando entró Vázquez Almuiña acompañado por el líder del PP de Cangas, José Enrique Sotelo, fue recibido al grito de consignas como "¡Conselleiro dimisión! ¡Non escapes. Fala con nós! ¡Fuxir é de cobardes!" Nadie pensaba que este pequeño grupo de manifestantes iba a entrar en el hotel, pero lo hizo y provocó un forcejeo con los policías autonómicos que, de paisano, intentaban evitar su entrada en el salón de reuniones. Los agentes, por momentos, quedaron desbordados y tuvo que ser José Enrique Sotelo quien se dirigió al líder sindicalista de la CIG, Xabier Aboy, quien le aseguró una reunión con Almuiña una vez finalizado el debate.

La conferencia del conselleiro no sirvió para acercar posturas enfrentadas. Dejó claro que la inversión que se iba a realizar en el Centro Integral de Saúde (CIS) alcanzaría casi los 7 millones de euros y que iba a tener la carta de servicios mejor de la comunidad autónoma, que lo único que estaba pendiente su consellería era que el Concello de Cangas pusiera a disposición los terrenos, con una superficie de 7.000 metros cuadrados, algo que no había hecho a pesar de solicitarlo en repetidas ocasiones. También indicó que el plazo para que el centro esté terminado son 25 meses. La única representante que quedó en el debate (los demás tenían cita con la habitual junta de gobierno), Lourdes Rial, no dudó en calificar el acto de electoralista y de agradecer sarcásticamente al PP por haber traído a Vázquez Almuiña a Cangas. La postura que defiende el gobierno es mantener el actual centro de salud de Cangas y que se construya el CIS con especialidades que eviten desplazamientos a Vigo. Y así lo hizo constar. El conselleiro ve inviable ese planteamiento de dos centros. Al comentario de que Moaña va a tener un centro nuevo, Almuiña contestó que si Cangas quieren un centro de Atención Primaria nuevo el CIS se le ofrecería a Moaña, aunque considera que por población quien debe tener el CIS es Cangas. Vázquez Almuiña considera que este asunto es prioritario.

Evidentemente que también hubo preguntas relacionadas con el centro de salud Aldán-O Hío y con la ausencia de pediatra en la Casa del Mar de Aldán. Quedó claro en el transcurso del debate que las parroquias de O Hío y Aldán no se ponen de acuerdo. Los vecinos de Aldán no quieren el nuevo centro de salud Aldán-O Hío en O Viso, es más, algunos ni quieren este centro. Los de O Hío no entienden que sea un trastorno para Aldán que el citado centro se levante allí donde se pusieron a disposición terrenos al Sergas, en O Viso. Almuiña aquí tuvo el escape de que mientras no haya acuerdo entre las parroquias no se iba a gastar dinero público en algo que después no se iba a utilizar. Un vecino de Liméns recordó que mientras ahora se quieren consenso, nadie preguntó a Cangas si quería que el Álvaro de Cunqueiro fuese emplazado donde está.

Respecto al pediatra de Aldán-O Hío, Almuiña señaló que la plaza se mantiene, pero que no hay personal para cubrirla, debido a la escasez de estos profesionales y que mientras se opta por la política de la agrupación, que otorga mayor seguridad al paciente.