El Concello de Moaña remitió hace un par de semanas a la Consellería de Infraestruturas de la Xunta y al Ministerio de Fomento del Gobierno central sendos escritos pidiendo una modificación de la señalización en la rotonda de Domaio y en las salidas de la autopista AP-9 hacia la comarca de O Morrazo, respectivamente. Y es que en ambos puntos se indica que la nueva autovía es el único camino para dirigirse a "Moaña", limitando la carretera general PO-551 exclusivamente a los visitantes de la parroquia de Domaio, lo que puede suponer una confusión sobre todo para turistas y conductores que no conozcan la zona.

El concejal de Mobilidade, Ezequiel Fernández, recibió esta semana respuesta del Ministerio de Fomento asegurando que no se cambiaría la señalización porque ya se indican directamente los nombres de las carreteras "AG-46" y "PO-551" y los principales destinos de Moaña y Cangas, aunque éstos no aparezcan junto a la carretera general. El titular de Mobilidade anunció que responderá a la carta insistiendo en la necesidad de señalizar correctamente la salida de la autopista tanto desde Rande como desde Pontevedra.

Explicó en su día que las indicaciones actuales están desviando todo el tráfico hacia el centro de Moaña por la nueva autovía, lo que genera una densidad de coches demasiado alta en la bajada desde la salida de Broullón por la carretera PO-313. Además de obligar a aquellos que quieren visitar Moaña a dar un rodeo desde la parte alta en la que sale esta vía de alta capacidad.

La autovía continúa con su último tramo en obras. No estará concluida hasta el primer semestre de 2019 y llegará hasta la primera salida de Cangas del Corredor.