La Sociedad Gitana de Galicia explicaba ayer a través de un comunicado que el niño herido tiene tan solo dos años de edad y que fue "atacado por un perro peligroso que estaba amarrado en una silla de madera con poco peso", llegando a arrastrarle unos de 4 metros.

Aseguran que la rápida intervención de los usuarios del mercadillo "evitó una desgracia y que ahora estemos hablando simplemente de lesiones", ya que el niño, además del golpe en la cabeza provocado por la caída, tiene "arañazos y roturas de la ropa debido a las mordeduras del animal".

Sociedad Gitana asegura contar con testigos de que el perro agredió también a quienes intentaron reducirle y desmarcan a los vendedores ambulantes de la agresión a la dueña, aunque reconocen que "una viandante llegó a darle dos grandes tortazos".

Afirman que los vendedores "ofrecieron y dieron agua a la dueña del perro, tratando de tranquilizarla" y le recriminan que ella "en ningún momento se preocupó por el estado del niño; solo se interesaba por su perro".

Tampoco están satisfechos con la actuación de la Policía Local "que llegó a identificar a algún vendedor ambulante que no tuvo nada que ver con esos tortazos, pues no participaron ni se movieron de sus puestos".