El alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos, aseguró ayer que el ayuntamiento dispone de partida presupuestaria para afrontar el derribo del gimnasio Sport Club, del exconcejal Nardo Faro Lagoa. El regidor se refirió a las quejas de los vecinos de un edificio de la zona, que reclaman al juzgado la imposición de multas coercitivas a Pazos por la demora en la ejecución de la sentencia. "Non estou pola labor de adicar a metade do meu salario a pagar as consecuencias dese ximnasio, pero fai falla adxudicar a demolición e dar todos os pasos precisos", asegura. Pazos explica que los servicios jurídicos y urbanísticos del Concello están trabajando en este expediente, aunque recuerda que agosto es inhábil en términos administrativos. "En calquera caso as responsabilidades habería que pedirllas a quen lle deu esa licenza, que foron os socios de goberno de Faro Lagoa. Deberían explicalo Sotelo e Rafael Soliño", concluye Pazos.