El pleno aprobó con los votos a favor de BNG y PSdeG-PSOE y la abstención del PP una modificación de crédito de 715.000 euros con cargo al remanente de tesorería, para asumir inversiones financieramente sostenibles, como la sustitución del sistema de climatización de la casa consistorial, las mejoras en saneamiento y abastecimiento en la calle Curros Enríquez y en A Xeira o la adquisición de un lote de luminarias LED. Santamarina presumió de músculo financiero al hablar de un superávit en 2017 de 1,6 millones, de un porcentaje de endeudamiento del 42 por ciento, un remanente de tesorería de más de un millón de euros y un periodo de pago a proveedores de 6,45 días, condiciones todas ellas imprescindibles para poder acometer estas inversiones.

El PP reconoció que se cumplía lo estipulado por ley y que las actuaciones eran necesarias, pero habló también de riesgo al tener que finalizar 2018 sin déficit para que las inversiones puedan acometerse.