El referéndum o el denominado proceso de participación ciudadana abierto por el gobierno municpal para elegir los festivos locales fue una de las iniciativas con la que el tripartito trató de marcar diferencias. Los tribunales de justicia impidieron que este proceso, que iba a tener su punto culminante con la votación el pasado día 27 de mayo, siguiera adelante. Pero el gobierno local no se arrepiente de nada y asegura que se volverá a poner en marcha siguiendo las pautas que marca la legislación para estos casos, aunque consideró exagerado que un proceso de participación vecinal cuyo único cometido era elegir los festivos locales fuera prohibido de forma tan tajante y dando aviso del mandato judical con tan solo dos días de adelanto. Pero ya se anunció que abría más proceso de este tipo, para asuntos como pueden ser los presupuestos municipales.