El proyecto de para la eliminar el Tramo de Concentración de Accidentes (TCA) está en fase de exposición pública desde finales de mayo y los afectados han comenzado a estudiarlo con detenimiento para valorar las posibles afecciones. Algunos se han reunido incluso con responsables municipales para trasladar sus inquietudes, sobre todo por las dimensiones de las dos rotondas que se prevén. Desde el Concello de Bueu avanzan que en los próximos días solicitarán una reunión con la Axencia Galega de Infraestruturas (AXI) para sondear si es posible reducir el tamaño de esas glorietas o incluso desplazarlas.

EL TCA comprende una distancia de tres kilómetros, desde Lapamán hasta Petís. La primera de las glorietas se ubicará justo en el inicio del tramo, para mejorar el acceso a la playa de Lapamán, mientras que la segunda estará a un kilómetro, en el lugar de Castrelo. Los vecinos con propiedades y viviendas en las inmediaciones se muestran preocupados por la afección que conlleva la construcción de estas rotondas, que tendrán un diámetro de 28 metros. Se trata tanto de la superficie que perderían de fincas, que en algunos casos son urbanizables, como las consecuencias sobre los accesos a parcelas y casas. "Non está claro como van quedar os actuais ramales de entrada, que neste proxecto quedan insertos dentro da propia glorieta", reconocen desde el gobierno local.

El consistorio intentará cerrar en los próximos días una reunión con responsables de la AXI para valorar qué posibilidades hay de modificar esta parte del proyecto, ya sea mediante una reducción de la circunferencia de las rotondas, o incluso desplazándolas ligeramente. "Os veciños e propietarios son absolutamente conscientes de que a actuación é necesaria, algo que é moi importante. Iso sí, hai cuestións que se poden mellorar, sobre todo no que respecta á ocupación de terreos", manifiestan desde el Concello de Bueu.

El plazo de información pública del proyecto estará vigente hasta el próximo 3 de julio. Según la documentación aportada por la Consellería de Infraestruturas las obras afectarían a un total de 34 parcelas, ocupando una superficie global de 4.500 metros cuadrados. La previsión expresada desde el departamento autonómico pasa por iniciar el proceso de expropiaciones a finales de este mismo año. El valor del suelo y de los bienes afectados se estima en algo más de 156.000 euros.