Los problemas de personal que sufrieron en los últimos años los concellos de O Morrazo a la hora de contratar a socorristas y patrones suficientes para vigilar sus arenales en verano se repetirá en esta ocasión, y quizá con más crudeza, a tenor de lo vivido ayer en las pruebas físicas celebradas en Moaña. Y es que solo se presentaron ocho candidatos para socorrista y cuatro para patrón, muy por debajo incluso de los admitidos tras el trámite administrativo. Y es que estaban citados a las pruebas 15 aspirantes a socorristas de los 26 que iniciaron la presentación de candidaturas y hasta siete aspirantes a patrón de los 11 que lo intentaron.

Sobre la arena de la playa de O Arnado, en Meira, se dieron cita ayer los candidatos a primera hora de la tarde. Las pruebas no se pudieron celebrar en el arenal de O Con, el único con bandera azul de Moaña, al coincidir con la hora de pleamar.

Los asistentes explican la razón de que haya tan pocos candidatos: "el curso que nos habilita hay que hacerlo en A Coruña y cuesta 1.300 euros. Poca gente querrá invertir en él para conseguir un contrato de solo tres meses cada año", indica uno de los aspirantes a socorrista.

Otro se quejó de los procesos selectivos con distintas pruebas físicas en cada municipio. "Temos que facer unha proba en cada Concello. Deberían facer unha proba unificada para toda Galicia e non ter que examinarse varias veces. Ademais, para aspirar ás praias de Moaña tes que estar inscrito, si ou si, na Oficina de Emprego de Cangas", recordó.

Y eso que en esta ocasión el número de candidatos tenía razones para incrementarse, pues varios de los que participaron ayer en las pruebas consiguieron hacer el curso habilitador subvencionado el año pasado por el Concello de Bueu. Es el caso de Abel Álvarez, un moañés de 26 años. "Es la primera vez que me presento. Estoy opositando para bombero e hice el curso de socorrismo porque me gusta el trabajo en emergencias. Ya hice las pruebas en Marín y estaré también en las de Cangas".

Preparándose para unas pruebas físicas tan exigentes como las de bomberos, este aspirante considera que las previstas para acceder a socorrista suelen ser "sencillas" y entiende que se trata en buena medida para no descartar a muchos candidatos ante la falta de personal. Ayer, en Moaña, fue descalificado al menos uno de los aspirantes, que denunció haberse pinchado en el pie mientras corría en la arena.

Las pruebas físicas en Moaña para los futuros socorristas consistieron en correr 200 metros sobre la arena y nadar 100 metros fijados en una boya frente a la playa. Los ocho candidatos corrieron en dos tandas de cuatro competidores cada una.

Por su parte, los aspirantes a patrón tuvieron que demostrar su destreza con la nueva zódiac del Concello, ejecutando distintas maniobras.

Miguel Moledo, de 20 años y vecino de Meira, se presentaba también por primera vez. "Tengo experiencia como socorrista en la playa fluvial de Pontevedra, contratado a través de una empresa privada", explica este estudiante que también realizó el curso subvencionado por Bueu. Espera conseguir un puesto no muy lejos de su casa, en Moaña o Cangas, para que le compense el sueldo de los tres meses de verano. "Me decanté por este trabajo porque me gusta y me parece ameno", desvela.

En julio de 2017 Cangas necesitó acudir incluso a una empresa privada para completar el número de socorristas desplegados en sus playas con bandera azul.

La intención de Moaña es contratar a seis socorristas y dos patrones, al igual que el año pasado. Sin embargo, en los últimos dos veranos no ha podido llegar a dicha cifra, pues la falta de personal hizo que los que participaron en las pruebas se decantasen por otros concellos. Los tres primeros socorristas y los dos patrones se desplegarán en la playa de O Con, que debe tener vigilancia de forma obligatoria y se paga con fondos propios del Concello.

Los otros tres socorristas se destinarían a vigilar el céntrico y concurrido arenal de A Xunqueira. Por falta de personal en 2016 solo se pudo cubrir esta zona de baño de martes a domingo, y en 2017, por una baja, A Xunqueira solo estuvo vigilada hasta finales de julio.