La jornada dominical de sol llevó a muchos vecinos de Vigo a las playas de O Morrazo, pese al cierre del Corredor que no abrirá, en forma de autovía, hasta el viernes. A partir de las 18.30 horas comenzó el tráfico denso en la carretera general PO-551. La Policía Local de Moaña reguló la salida del cruce de Meira. Desde las 20.00 horas el atasco fue intenso y de varios kilómetros entre la rotonda de Domaio y el casco urbano moañés, y también en la bajada de Meira. El tráfico denso se sintió en Cangas.

Por otro lado, mañana, martes 8 de mayo, el tramo abierto del Corredor do Morrazo registrará tres cortes al tráfico de cinco minutos cada uno, que se señalizarán de forma manual. Los cortes se producirán antes de la entrada del tramo de desvío provisional habilitado en la zona de O Meixueiro y limitado a 40 kilómetros por hora. La razón vuelve a ser una nueva jornada de voladuras en el gran desmonte de O Meixueiro, que está acometiendo la empresa que ejecuta la construcción del tercer y último subtramo de la autovía de O Morrazo.

Las explosiones con dinamita y los correspondientes cortes están fijados para las 11.00; las 13.00 y las 15.00 horas. Los constructores emplean sismógrafos para tratar de minimizar las afecciones a viviendas cercanas y al depósito de agua.

Por su parte, desde hoy se acometerán los últimos retoques en los dos primeros subtramos de autovía. Queda el entorno de la rotonda de Domaio por pintar en los nuevos carriles, así como finalizar las señalizaciones verticales y horizontales. El viernes día 11 debe estar todo listo para su puesta en servicio, liberando a la carretera general, PO-551, de toda la carga de tráfico, tras siete meses de atascos en las horas puntas.