Operarios y maquinaria de la empresa Construcciones Vale trabajan desde ayer en el tramo de la calle Baiona comprendido entre la Avenida de Marín y Antonio Nores que ha quedado cortado al tráfico para facilitar las obras de urbanización financiadas a través del Plan Concellos de la Diputación. El primer paso es la apertura de zanjas para instalar las tuberías de canalización de aguas pluviales, servicio del que carece y que se incluye en el proyecto. El siguiente será la conexión de suministros pendientes, el ensanche de las aceras y pavimentación de toda la vía.

Las previsiones del Concello apuntan a que la obra deberá finalizar en el plazo de un mes, a principios de mayo, aunque la meteorología puede jugar un papel determinante en el cumplimiento de los pronósticos. La concejala de Obras e Servizos, Mercedes Giráldez, y la arquitecta del Pepri (Plan Especial de Protección e Reforma Interior), Mª Isabel Medraño, supervisaron ayer el inicio de los trabajos y expresaron su "confianza" en que durante el mes de mayo la situación esté normalizada. Aunque en las bases de licitación figura un plazo de seis meses para la ejecución del proyecto (incluye la urbanización de las calles Baiona y Méndez Núñez), la empresa adjudicataria rebajó el período a solo un mes, que se cumplirá "se non aparecen imprevistos", matiza Giráldez.

Como paso previo a los trabajos, el Concello de Cangas decidió cortar Baiona al tráfico -solo se permite la entrada a los garajes y vehículos de emergencias- y habilitar como alternativa la calle Gondomar. La Policía Local insiste en llamar a la precaución al circular por la Avenida de Marín, eje principal de esta zona de Cangas, y calles aledañas, en las que se han producido algunas modificaciones en el tránsito, ya señalizadas, para interferir lo mínimo en la circulación.

Los técnicos señalan que el trazado de la calle Baiona se ejecutó por tramos de urbanización, según se iba desarrollando la zona, lo que supone también que el alumbrado está obsoleto en una parte del trazado, las aceras no alcanzan el metro de anchura en este tramo y están construidas en diferentes materiales y alturas, intercalarán plaquetas de adoquín de diferentes colores, no existe recogida de aguas pluviales, se producen encharcamientos, están sin pintar los espacios para aparcamiento y los carriles de circulación en mal estado y cuyo sentido no está claro. Según el proyecto, esta actuación pretende armonizar todo el conjunto y mejorar los servicios, la seguridad y la imagen de esta zona del centro urbano cangués.