El Celta desveló ayer algunos de los detalles del convenio alcanzado a finales de 2017 con el Concello para el uso y aprovechamiento del estadio de Balaídos. Su presidente, Carlos Mouriño, explicó que el club debería hacer frente a un canon que asciende a casi 890.000 euros al año por el uso de la superficie comercial del recinto. Sobre el período de la concesión, comentó que podría ser de 50 años, por lo que expirado ese plazo el club habría abonado cerca de 40 millones de euros, el precio de las obras en el coliseo celeste.

Mouriño aseguró que el Celta, "a día de hoy, ha gastado tanto como el Ayuntamiento en Balaídos" y rechazó que "nadie esté regalando nada" al club. Durante su intervención, fue crítico también con los plazos marcados por el Concello. Según explicó, no le consta que haya habido "ningún" adelanto desde diciembre a pesar de que el cronograma entonces pactado contemplaba que el Celta solicitase la concesión este en marzo de 2018.

Mouriño no despejó si el Celta seguirá jugando en Balaídos y, sobre la posibilidad de construir un nuevo estadio, se limitó a asegurar que tiene que "barajar todas las opciones". Descartó también la venta del club.