Transcurridos 25 años de la famosa huelga de las basura que paralizó el Concello de Cangas en verano, las numerosas plazas que estaban vacantes y pendientes de sacarse a concurso permanecen en ese estado de hibernación. En el año 2007 hubo un intento por parte de la que era concejala de Personal, Maruchi Álvarez (ACE), en el gobierno tripartito de Clara Millán (BNG), de sacar las plazas vacantes a concurso-oposición, pero no salió adelante, ni se intentó, todo quedó en una declaración pública realizada a los pocos meses de tomar posesión, demasiadas presiones.

La oferta de empleo público que la junta de gobierno local aprobó en octubre de 2017 y que salió publicada en el BOP establece hasta 120 plazas vacantes (40 de personal funcionario y 80 de personal laboral fijo), la mayoría de las cuales lo están desde el año 1993, fecha en la que se firmó el famoso laudo arbitral que puso punto final a una huelga en el servicio de la basura. Son incluso más vacantes de las que figuraban en la oferta pública de empleo realizada en el año 2007, cuando el gobierno contemplaba 71 puestos de trabajo vacantes. Hay que tener en cuenta que el Plan de Ajuste fue el inicio del adelgazamiento de la plantilla y eso impidió que plazas que quedaban vacantes por motivo de jubilación o fallecimiento no se cubrieran.

Ahora mismo, en la oferta pública de empleo del Concello de Cangas figuran, dentro del capítulo de personal funcionario, 14 auxiliares administrativos, un trabajador social, un auxiliar social, 3 policías locales, un sepulturero, un auxiliar de archivo y 12 conserjes; mientras que como personal laboral fijo figura 5 oficiales de segunda y 5 oficiales de servicios múltiples, 8 oficiales B Obras, un 1 carpintero, 2 conductores de Obras, 8 peones de obras y otros tanto de limpieza viaria y 22 limpiadoras. En la lista total hay desde un arquitecto técnico, un maestro, un fisipoterapeuta o un inspector de tasas, hasta un sepulturero y un sicólogo, pasando por ocho profesores de música. Una oferta, como se puede ver, muy variada, que no difiere mucho de la de los últimos años. Por cierto, que el Concello de Cangas aún no aprobó sus presupuestos para este año y cuando lo haga dispondrá de un mes para sacar la oferta de empleo pública de 2018, aunque como se puede comprobar el año pasado lo hizo en noviembre. Para este año 2018, la intención es sacar a concurso varias plazas de limpiadoras de edificios públicos. Hay que recordar que en la última oposición para participar en el listado de lipiador@s edificios públicos se presentaron más de 700 personas.

Este gobierno local ya no se pronunció en absoluto sobre una oposición para las plazas vacantes que ahora mismo se cubren con personal indefinido. En la época de la concurrencia pública y de la transparencia Cangas sigue con un elevado número de trabajadores municipales que no necesitaron de una oposición para ejercer en la administración local. Es una situación que se perpetúa en el tiempo, independiente de los partidos que gobiernen. Las condiciones que exigen los sindicatos para abrir un proceso de oposiciones entran en conflicto con el de la libre concurrencia, aunque siempre existe la posibilidad de que se otorguen puntos por los años de trabajo, muchos ya con 30 años en esta situación de interinidad de la que ya no quieren salir, por miedo a perder a estas alturas la plaza.

En el año 2011 había 290 funcionarios y contratados laborales en el Concello de Cangas, que representaban un gato de 9 millones de euro. Con la política de ajustes, de no cubrir plazas de personal que se jubiló, el gasto se redujo a 7,4 millones de euros en 2015.