Los conductores de la comarca que acuden diariamente a Vigo por motivos laborales sufrieron ayer la segunda jornada de obras en la plataforma central del puente de Rande y esta mañana sufrirán la tercera. Aunque la Policía Local de Moaña no constató más retenciones de las habituales en las horas puntas tras el cierre temporal del Corredor, lo cierto es que los agentes entienden que el impacto está siendo minimizado por la semana de carnaval, en la que muchos trabajadores morracenses aprovechan para coger vacaciones.

Estas obras obligan a los vecinos de O Morrazo a coger el nuevo carril exterior para circular en sentido a Vigo, sin posibilidad de pasar a la parte abierta de la plataforma central, que tiene habilitado un solo carril para cada sentido destinado a los que circulan entre Vigo y Pontevedra. De esta forma, y se espera que durante meses, los conductores de la comarca se ven recluidos al carril exterior de forma exclusiva, tal y como se planteaba en el proyecto inicial de ampliación del puente.

Aquella idea inicial fue descartada tras las quejas desde O Morrazo, en un compromiso que Fomento adquirió con los alcaldes.

Las quejas de los usuarios no se hicieron esperar y el mismo martes las llamadas de protesta se sucedieron en el Concello de Moaña. De hecho, el ejecutivo local recogerá los escritos de protesta de los vecinos para remitírselos al Ministerio de Fomento. Desde la empresa constructora se califican estas obras de "menores, sin importancia"

Las quejas llegan también de muchos usuarios que acuden diariamente a Vigo desde Pontevedra. Y es que un buen número de ellos inician el tránsito por la carretera nacional o salen de la AP-9 en la rotonda de Domaio para volver a incorporarse. Las razones del primer supuesto son las del ahorro de la totalidad del peaje. Las del segundo son ahorrarse por lo menos el euro que se devuelve a los conductores en el peaje de Domaio. Estos conductores ahora son derivados también por el carril externo. Varios de ellos criticaban ayer la nueva situación con las obras, lamentando que se mantenga el peaje cuando las condiciones del puente de Rande ya no son las de una autopista.

El desvío por el exterior del puente para los morracenses llega justo en la salida de la rotonda de Domaio. El carril izquierdo de acceso al puente está cortado y rodeado por conos.

Solo se permite circular por el carril derecho que conduce directamente a la plataforma externa del puente. Al llegar a la misma, una furgoneta con un cartel luminoso y varias vallas delimitan claramente los carriles a los que no se puede acceder. En el camino de regreso desde Vigo, de momento los vecinos de la comarca pueden optar por el nuevo carril o por uno de los habilitados en la plataforma central.