El nuevo puente de Rande genera "inseguridad"

Usuarios de Cangas y de Moaña consideran que los carriles ampliados son una "ratonera" ante un incidente

Cangas/Moaña

03·01·18 | 03:05

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El nuevo Rande, visto desde abajo

Hay días en los que Iván Arcos cruza el Puente de Rande hasta ocho veces -cuatro de ida y cuatro de vuelta-,debido a su trabajo como conductor de autobús de una de las empresas del transporte público por carretera que une O Morrazo con Vigo. El sábado, cuando se inauguró la ampliación del puente, con el tercer carril en ambos sentidos, lo hizo en dos ocasiones y hubo viajeras, tal y como asegura, que desde sus asientos le decían, y aún ayer le seguían diciendo: "Filliño non vaias polos novos carrís".

Reconoce que las nuevas "alas" del viaducto son bastante estrechas y los vehículos quedan a expensas de quedar bloqueados en un atasco en caso de un accidente o simplemente por una avería o un pinchazo de un turismo que circule por delante. Los nuevos carriles se han construido separados de la plataforma central de siempre del puente a una distancia de 6,75 metros, de ahí el temor a cruzar por ellos y quedar bloqueados a unos 50 metros sobre el nivel del mar. En caso de alguna incidencia, se han dispuesto tres zonas de conexión o plataformas metálicas para realizar desvíos de tráfico. Los usuarios se preguntan si las pruebas de carga que se realizaron antes de la apertura al tráfico de la ampliación, también incluyeron estas plataformas de evacuación que se pondrán en funcionamiento una vez que haya un incidente.

Por el momento, el tercer carril de la ampliación, a ambos lados del puente, va bastante descongestionado de tráfico porque muchos conductores optan por seguir circulando por la actual plataforma central de dos carriles.

"A mí no me inspira confianza", aseguraAna Díaz, vecina de Moaña. Considera que el tercer y nuevo carril del puente es estrecho y poco seguro: "Cuando haya un accidente se verá si hay problemas". Su compañera en el trabajo, María Giráldez asegura que ella estrenó la ampliación y para viajar a Vigo lo hizo por el "ala", pero dice que la encontró muy estrecha por lo que la vuelta la realizó por la plataforma central.

En un principio la ampliación del puente se diseñó para que el tercer carril fuera de uso exclusivo para el tráfico de O Morrazo, aunque finalmente y con las obras ya en marcha esa idea se modificó para dejar vía libre y que los usuarios de esta comarca, tanto los que salían como los que entraban, pudieran elegir por ir por el carril aislado o por los dos centrales de siempre.

Para el alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos (ACE) la impresión que dan los nuevos carriles "es de inseguridad y de cierta claustrofobia. Inseguridad en el sentido de que la impresión es de desprotección porque parece que vas volando directamente encima del mar y en gran parte no hay zonas de seguridad que te permitan protegerte en caso de accidente o de cualquier incidencia. Claustrofobia porque, salvo en las entradas del puente en dos direcciones, en la que hay cierta anchura, el resto del carril apenas da para el ancho de un coche o de un camión, lo que hace imposible apartarse y permitir el tráfico en caso de cualquier anomalía".

Pazos también cree que habrá que tener en cuenta los días de viento, que ya de por sí "hacían difícil atravesar el puente por los carriles centrales, y menos ahora, con un carril lateral separado del tronco, que vuela directamente sobre la ría". De igual manera asegura que la señalización es escasa en ambos sentidos: "A la altura del peaje te encuentras con una señal que marca dos veces Vigo sin especificar qué carril debes tomar para ir por cada sitio (central o lateral). También insiste en que las obras están sin acabar ya que cuando coges dirección Vigo, desde la rotonda de Domaio hasta el peaje, sólo está abierto un carril de circulación, poduciendo un embotellamiento.

La regidora de Moaña, Leticia Santos (BNG), además de insistir en su crítica a la subida de peajes en la autopista, también considera inseguros los carriles laterales y dice que, aunque no los estrenó todavía, prefiere los dos centrales ya que en caso de avería o de accidente, su ancho permite una atención más rápida y eficiente.

El edil de Tráfico de Moaña, Ezequiel Fernández (PSOE), considera los nuevos carriles "una ratonera. En una emergencia, los coches quedarán atascados y no hay margen para trabajar y acceder a ellos para desatascar" . Ezequiel Fernández tiene dudas sobre las plataformas de evacuación y dice que está por confirmar si sólo serán para uso de los vehículos de emergencias o para el tráfico en general. Sigue manteniendo que fue una obra innecesaria que reduce la vida útil del puente que ahora tendrá más carga de tráfico. Se estima que pasará de 4.500 a 6.400 vehículos/hora, con un aumento del 42%.

Aunque también hay opiniones favorables a la ampliación, como la de la canguesa Beatriz Fernández, conductora de autobús, entre los taxistas, sin embargo, cunde el pánico por cómo se ha hecho: "Es una inversión desafortunada", asegura en Cangas José Manuel Díaz. Entiende que la ampliación fue el Plan B del gobierno para no perjudicar a Audasa con el otro Plan A que era la autovía de Porriño a Pontevedra. Considera que se ha hecho un proyecto un poco a lo loco, tanto es así que el puente sigue sin arcenes.