En caso de que finalmente el cuadro de Federico Guisasola (1830-1882) se deposite en el Museo Massó, el titular y propietario del mismo seguirá siendo el Concello de Bueu. La entrega en depósito es una cesión para facilitar su conservación, tal como ocurre con los bocetos de Lugrís o más recientemente con los planos del "ensanche de la villa" realizados en 1924 por Rafael Picó. Curiosamente estos importantes trabajos podrían volver a coincidir y compartir espacio.

Los datos aportados por el archivero municipal constatan que el cuadro de Guisasola y el plano de Picó estuvieron durante muchos años en el salón de plenos del Concello. Tiempo más tarde el trabajo de Picó pasó a la antigua Alcaldía, donde hoy está el despacho del concejal de Urbanismo. Hace unos meses los dos planos que existían fueron depositados en el Museo Massó, que ya ha restaurado uno y en 2018 restaurará el segundo. Ambos formarán parte de una gran exposición sobre la transformación urbanística de Bueu con la industria de la conserva.