Un vertido incontrolado llenó ayer de fecales la playa y el muelle de San Cibrán, en la parroquia canguesa de Aldán. Toneladas de heces se acumularon en el arenal desde por la mañana temprano y algunas alcanzaron el mar ya a las 04.00 horas, cuando algunos marineros que faenan con nasas se encontraron con esta situación.

La concesionaria del ciclo del agua, la UTE Gestión Cangas, negaba ayer al patrón mayor de la Cofradía de Aldán, Jorge Gregorio, que las toneladas de heces que se extienden por la playa de San Cibrán fuese consecuencia de una avería en la estación de bombeo situada en el río Orxas. "A empresa asegura que está ven todo.Di que a estación de bombeo está ben". Jorge Gregorio lo duda. Afirma que siguieron el vertido desde la playa y llegaba hasta el río Orxas, muy cerca de donde está la estación de bombeo. También dice que es imposible que la limpieza de fosa de purín de una casa particular pudiera arrojar semejante cantidad de fecales.

La presencia del vertido coincidió con la de los biólogos de la Xunta de Galicia, que acudían a la zona para examinar si las cenizas del incendio del domingo en el Bosque Encantado estaban presentes en el medio marino. Fueron los propios biólogos quienes informaron a los miembros de la Cofradía de Pescadores de Aldán y a las mariscadoras que el vertido eran fecales y que se aconsejaba no marisquear ni hoy ni mañana. El patrón mayor asegura que van a tomar muy en serio la recomendación de los biólogos de la Xunta porque no quieren perder la denominación de Zona A por culpa de este suceso.

Al mediodía no se había presentado todavía nadie del gobierno municipal en la zona. El patrón mayor se había puesto en contacto telefónico con la concejala de Medio Ambiente, Tania Castro, quien envió a la Policía Local para realizar un informe. Los agentes y los técnicos de la empresa concesionaria del agua pudieron comprobar que el bombeo funcionaba perfectamente, por lo que se descartaba que el vertido fuese consecuencia de una avería. La concejala de Medio Ambiente del Concello deCangas, Tania Castro, manifestó que estaba claro que las toneladas de fecales que aparecieron en la playa no pueden proceder solo de una vivienda, por la limpieza de una fosa séptica. Aseguró que se realizaría una investigación de los establecimientos, ya que se sospecha que el vertido procede de algún sitio donde concurre mucha gente. "Non vamos a permitir que cousas de estetipo impidan faenar as mariscadoras". Por su parte, el alcalde de Canga, Xosé Manuel Pazos, anunció su intención de denunciar ante la Consellería de Medio Ambiente el citado vertido. También Jorge Gregorio manifestó que no es la primera vez que pasaba algo semejante, aunque no en estas proporciones y que también acostumbraba a suceder con el final del verano y las primeras lluvias del otoño.

La mala imagen y también los malos olores que desprendían las toneladas de heces provocaron también las quejas de la presidenta de la Asociación de Vecinos de Espiñeira también se hacen sentir. "Chamamos a Seprona, e non había ninguén, preguntamos no Concello por Medio Ambiente, e tampouco. Nunca está ninguén cando fan falta".