El artista cangués Camilo Camaño Xestido llevó ayer el arte a una zona de destrucción. Y es que pintó un cuadro al aire libre, al lado del astillero tradicional de Casqueiro que en junio fue quemado de forma intencionada y que se encuentra en proceso de catalogación por parte de la Secretaría Xeral de Patrimonio. A lo largo de una hora y media, y ante la vista de algunos curiosos que se dieron cita en el entorno, el artista pintó una obra que considera un canto contra el "atentado" cometido contra los astilleros. "Trátase de reclamar que as tradicións e a cultura son xérmolo de paz e de confraternidade. Pola contra, a violencia e o terrorismo son destrucción e morte. Quero chamar a atención sobre que non se pode xustificar a violencia nunca e non podemos calar ante este tipo de actos".

Mientras pintaba, Camaño Xestido se refirió también al reciente intento de reventar un concierto, en el marco de las protestas contra las carpinterías de ribeira. "O que ocorreu nesa actuación foi absolutamente intolerable", dijo.

La pieza de arte final consiste en un cuadro que mezcla referencias a la cultura, el mar y el monte. "A natureza simboliza a victoria do planeta. O mar a riqueza e reflexo tres libros que representan a cultura a conservar. As flores, ademais, pretenden mandar unha mensaxe de paz". La parte inferior del cuadro cuenta con tonos negros y rojos. Los negros fueron pintados en buena medida con tizones extraídos de la propia madera quemada del astillero y "simboliza o terror". El rojo, por su parte, representa "a violencia, que sempre remata en morte".

La intención del artista es ceder el cuadro a la agrupación Sueste, que utiliza las carpinterías de ribeira para recuperar las embarcaciones tradicionales.

En la esquina superior derecha de la pieza escribió un pequeño texto a favor de la cultura y en contra de la violencia, "con independencia de si se está de acordo ou non con algo".