El abogado Cándido Conde-Pumpido, que representa a Irene Giménez en el caso de presunta extorsión en los mercadillos ambulantes, acaba de recusar al juez por "enemistad manifiesta" con la familia de Sinaí Giménez y sus letrados. La defensa presentó recusación contra el magistrado David Pérez Laya, titular del Nº3 de Instrucción de Cangas, al entender además que mantiene una "amistad íntima" con la representante del ministrio fiscal, rompiendo así el principio de equidistancia con defensa y acusación.

Declaraciones

David Pérez Laya llamó a declarar desde el día 2 hasta el próximo día 10, a un total de 26 personas que el Ministerio Fiscal investiga por actividades relacionadas con el clan de los Morones, varios de cuyos miembros permanecen en prisión acusados, entre otros delitos, de extorsión, coacciones y blanqueo de capitales. La mayoría comparecerá por primera vez en sede judicial, previsiblemente en las dependencias de Cangas, y algunas domiciliadas fuera de Galicia podrán hacerlo por videoconferencia. Entre ellos hay familiares o allegados del autoproclamado "príncipe de los gitanos", Sinaí Giménez Jiménez, que permanece en la prisión asturiana de Villabona, y de su hermano Saúl, encarcelado en Monterroso (Lugo).

Este lunes día 7 se retoman las declaraciones, para las que están citados Antonio Escudero Jiménez, Faustino Jiménez Escudero y el testigo protegido número 7, que comparecerá por videoconferencia y con uso de un distorsionador de voz para evitar que sea reconocido y objeto de represalias. El martes 8 será el turno de Pablo Javier Meana Prieto, al que se pide declaración como investigado en relación a las operaciones realizadas con uno de los vehículos intervenidos, de Juan Carlos Vidal García, vecino de Gondomar; de Enmanuel Mouriño Caglioni, domiciliado en Baiona; de Daniel Jiménez Jiménez y de Alba Hernández Pisa.