La Xunta de Galicia estudia alternativas para reducir el impacto de las obras en el tercer tramo del Corredor do Morrazo sobre los manantiales y recursos hídricos de Moaña. Técnicos de la Axencia Galega de Infraestruturas y de la asistencia técnica de los trabajos del tercer tramo del vial comarcal visitaron ayer Moaña para mantener un encuentro con el concejal de Urbanismo, Odilo Barreiro, y con diferentes colectivos de afectados por el trazado del Corredor. Lo hicieron visitando in situ algunos de los lugares que podrían resultar perjudicados por la transformación del vial en autovía y con el objetivo de minimizar el impacto que pudiese tener.
Las comunidades de regantes de Tribuna, Meixoeiro y Ameixoada, así como la Asociación de Vecinos A Paradela explicaron sobre el terreno las posibles afectaciones a fin de que los técnicos tomasen nota de las mismas. La intención es que se puedan prever las actuaciones necesarias para garantizar el mantenimiento de los servicios y así no crear perjuicios entre los vecinos. "Tanto as comunidades de augas como os veciños plantexaron a súa problemática e desde o Concello tamén fixemos fincapé en que se dea unha solución que asegure manter o servizo nas mesmas condicións. Non pode haber un descenso do nivel da auga, por exemplo", manifestó Odilo Barreiro. La receptividad de los representantes de la adjudicataria de las obras y de la Xunta fe positiva y se comprometieron a estudiar las peticiones en las próximas semanas para poder plantear alternativas.
La afectación es diferente entre los diferentes colectivos, si bien uno de los puntos más conflictivos es la de la fuente de Meixoeiro, que quedaría plenamente afectada por el trazado. De hecho, las arquetas para las captaciones de agua tendrán que ser trasladadas en una fuente "moi utilizada polos veciños da zona", apunta el edil de Urbanismo moañés. Barreiro subraya, asimismo, que cualquiera de las soluciones planteadas deberá evitar un corte total del Corredor. "Para nós é fundamental que se solucione todo pero co Corredor aberto. Non podemos renunciar a ese treito porque suporía trasladar todo o tráfico ó centro de Moaña", asegura. La idea es que en el mes de septiembre se produzca un nuevo contacto entre la administración autonómica y vecinos y representantes políticos de Moaña para plantear las alternativas más factibles.
El tercer tramo de los trabajos de transformación del Corredor en autovía corre a cargo de la UTE Covsa-Construcciones Taboada y Ramos y contempla el trazado entre Meira y Cangas, de casi 4 kilómetros. El presupuesto es de 13,7 millones de euros y el plazo de ejecución de 24 meses.
