El Círculo ha sido un referente de opinión. Ha tenido como cuatro partes diferenciadas: una, el hecho histórico de su propia creación, porque poner de acuerdo a la gente en Galicia no es una cosa fácil, y pedirle dinero para constituir un club era todo un desafío. Luego vino un claro periodo de influencer, la pretensión de ser lobby, de actuar como tal. Los últimos años apareció otro periodo que es el club como herramienta para trabajar en networking, lo que contribuye a que haya negocios. Y nos queda una nueva fase por venir, que tiene que ver con el mundo reputacional. El problema más importante que tenemos las empresas es la reputación. La acreditación y la reputación. Ser miembro del Círculo tiene que dar un plus frente a los demás, sin entrar en elitismos, pero tiene que ser un indicador de cierto prestigio.

La constitución del club. Cuando una comunidad de vecinos no es capaz de reunirse, ¿vas a reunir a los empresarios el entorno de manera transversal? Los empresarios suelen reunirse de manera vertical, los inmobiliarios, los de la pesca congelada, los de la madera... Pero de manera transversal, que afecte a todos los sectores económicos, no hay tantas instituciones. Es muy importante para la economía.

El momento es dulce. Es obvio que estamos superando todas las dificultades financieras que la crisis nos ha deparado, toda la problemática de la estructura societaria del club, que ahora se está poniendo en orden, tanto la asociación como la sociedad anónima propietaria de las instalaciones? Estamos en un momento societario bueno, con un poder de convocatoria envidiable. Ayer mismo se presentó un fondo de capital riesgo y había sesenta o setenta personas interesadas en el tema.

La reputación. El Círculo tiene un gran desafío, que es mejorar la reputación del empresario ante la sociedad. La sociedad tiene que ver a los empresarios como una bendición, porque son los que aportan riqueza, puestos de trabajo, dinamismo económico? No como millonarios. No podemos pensar que el Estado lo haría todo. Es esencial para una sociedad la existencia del empresario.

A tenor de lo que indican las cifras macroeconómicas, hay una tendencia de mejora del PIB. La transformación digital, la nueva definición de los puestos de trabajo, que es una cosa que sí me preocupa; la estructura demográfica de Galicia, que es un problema que debemos resolver entre todos.