La Policía Local de Cangas denunció este fin de semana a 9 jóvenes por consumo de alcohol en la vía pública, acogiéndose a la ordenanza para la convivencia.

En la noche del sábado, la Policía Local montó un control sobre en botellón, siguiendo instrucciones de la Jefatura. Entre la 01.00 horas y las 03.00 horas del domingo se procedió a denunciar a cinco jóvenes, vecinos de Cangas, 3 de Moaña y uno de Madrid, con edades comprendidas entre los 18 y los 20 años.

A los denunciados se aplicó la ordenanza para convivencia, que en uno de sus articulado prohibe el consumo de bebidas alcohólicas en vía pública. Las sanciones previstas podrían llegar hasta los 700 euros en los casos más graves.

Según apunta la Policía Local, con el inicio de la época estival se incrementa el botellón en el centro de la villa, por lo que la Policía tiene orden de controlar esta actividad. Colectivos vecinales se reunieron ya en varias ocasiones con el alcalde de Cangas para pedirle que tomara medidas.

La Policía Local de Cangas detectó también que el fenómeno del "botellón" se está desplazando a la zona del aparcamiento de Altamira, donde hay muestras inequívocas del mismo durante la mayoría de los fines de semana. Ya hubo quejas y protestas porque esta zona linda con el cementerio municipal y se teme que se produzcan actos de vandalismo en el interior del camposanto.

Por otra parte, la Policía Local recuerda que está abierto el aparcamiento de Altamira, situado en el centro de la villa. La intención es colocar señales que conduzcan a los foráneos a esta zona de aparcamiento público, ante las escasa oferta de plazas de estacionamiento en el frente marítimo.

A día de hoy todavía no se sabe si hay acuerdo entre el Concello y el dueño de la finca situada frente a la estación de servicio de Cangas, que en verano se acostumbraba a abrir para complementar la oferta de aparcamientos en el frente marítimo.