teresa pedrosa "Es una obligación tener suelo para no perder inversiones, pero también crear conocimiento" - "Ampliar el recinto franco de Balaídos mejorará la competitividad de los proveedores de PSA" - "A final de verano licitaremos la obra de los primeros 700.000 m2 de la Plisan por 20 millones"

-Se cumplen 70 años del Consorcio en Vigo, ¿qué papel ha jugado en el desarrollo de la ciudad?

-Ha sido imprescindible. Vigo sería una ciudad diferente sin él. El 2 de julio de 1947 se tomó la decisión de crear la Zona Franca y en abril de 1958 salía el primer coche de Citroën. La factoría está en Vigo porque había una Zona Franca para acogerla y ese fue el punto de inflexión y el germen de la ciudad más industrial de Galicia.

-¿Cuáles han sido sus grandes hitos en la economía local?

-Construyó el primer polígono industrial ordenado de Vigo y también el último. En 1986 se adaptó a la entrada en la UE transformándose en una agencia de desarrollo local que puso a disposición del área los parques de Bouzas, A Granxa, el PTL y Porto do Molle. Realizó el relleno de Bouzas desde el que se abrió la Autopista del Mar y facilita la salida de los vehículos de PSA y además colaboró en la transformación del frente marítimo. Construyó el Centro Comercial A Laxe y lo conectó con el Casco Vello. La regeneración del barrio también lleva la marca de Zona Franca.

-¿Cuál es el nivel de ocupación de sus polígonos y su peso en la economía viguesa?

-Están al 100% y, Porto do Molle, casi. Hay 650 empresas instaladas en los parques del Consorcio con 20.000 empleos directos, lo que representa a uno de cada cuatro trabajadores del área de Vigo. Un tercio de la riqueza del área sale de nuestros polígonos.

-Tras años con una presencia activa en el desarrollo de Vigo, ¿se ha centrado más en las empresas?

-Fue una decisión del Tribunal de Cuentas. Se analizó la actividad del Consorcio en la etapa 2002-2006 y se determinó que no podía hacer obras competencia de otras administraciones sin retorno ni vinculación con la empresa.

-¿Qué potencial tiene la ampliación del recinto fiscal de Balaídos?

-Mejorar la logística hace más competitivas a las empresas y esta ampliación permitirá acercar proveedores a la empresa matriz que es PSA. En Balaídos no hay un metro de suelo disponible, casi tuvimos que hacer una nave encima de otra y es un buen momento para que crezca la zona industrial en el mismo régimen que está ahora PSA y dar oportunidades a los proveedores de la automoción.

-¿Ha sufrido algún retraso el proyecto con la caída del PXOM?

-El plan parcial estaba ya licitado cuando se anuló y el Concello renunció a desarrollar su parte, pero el Consorcio sigue adelante con la ampliación del suelo industrial. En los próximos días se licitará el proyecto sectorial.

-¿Estará listo para el año 2019?

-Puede haber algún ajuste, pero el calendario se mantiene para 2019. La ampliación en marcha de los polígonos del Consorcio se concentrará en esta etapa 2017-2020.

-¿Con esta ampliación se da por cerrada la modernización del parque más antiguo de Zona Franca?

-Al llegar en 2012 detectamos que Balaídos estaba obsoleto y era prioritario actuar para enfrentarnos con garantías a mercados emergentes y a los retos de la empresa 4.0. Hicimos una mejora logística, de eficiencia energética, pusimos aparcamientos y naves y gracias a esa remodelación llegó a Vigo la K9 y el V20. Ahora estamos metidos en la transformación del de Bouzas.

-¿Cómo avanza el desarrollo de la Plisan después de más de una década en proyecto?

-Está desbloqueada, que ya es decir bastante. Me la encontré totalmente paralizada, con los promotores separados y unos terrenos fuera de ordenación. Hubo que volver al condominio, pagar las expropiaciones y regularizar un polígono con más de 6.000 contenciosos. Pero ahora tenemos en ejecución el proyecto de la primera fase.

-¿Para cuándo la obra y la venta del suelo de la Plisan?

-A finales de verano licitaremos la construcción de los primeros 700.000 m2 de suelo industrial, un proyecto de 20 millones de euros. Queremos iniciar la obra antes de que acabe el año y poner el suelo a la venta a lo largo de 2018. Los primeros 100.000 m2 se venderán a 50 euros y ya hay empresas que la visitaron para elegir su espacio. La Plisan ya tiene clientes.

-¿Se tramitará la creación de un nuevo recinto franco?

-Seguimos pensando que sería competitivo tener una zona de almacenamiento en régimen franco cuando llegue el tren a la Plisan. En el momento en que sea necesario se iniciarán los trámites.

-¿De qué forma puede ayudar Zona Franca a frenar la deslocalización de firmas a Portugal?

-Estamos volcados en lograr que la competitividad gallega sea cada vez más alta. Es cierto que hay empresas que se van a otros países, pero son muchas las que vienen. En 2012 en Porto do Molle había una empresa produciendo y tres construyendo su nave. Hoy son 165 las implantadas con 1.209 trabajadores y hay ocho empresas que preparan su llegada con 123 trabajadores más. Tenemos firmas que nos acaban de comprar hasta veinte parcelas y están haciendo ampliaciones. La obligación del Consorcio es tener siempre suelo disponible para que no se pierda ninguna inversión y por eso trabajamos en la Plisan y la ampliación de Balaídos y el PTL. Pero también es importante participar en el desarrollo de conocimiento y fomentar el emprendimiento.

-¿Tiene demanda garantizada la ampliación del Tecnológico?

-Mucha. Una parte importante de la ampliación se reserva para el uso de medianas y grandes firmas comerciales y tenemos demanda desde hace años, pero el proyecto se retrasó por la anulación del Plan Xeral y la quiebra de la empresa que iba a redactarlo.

-¿Qué plazos manejan?

-Los temas urbanísticos son delicados, pero está en redacción el proyecto sectorial y en 2018 se procederá a la expropiación.

-¿Siguen en contacto con Ikea?

-Vienen de vez en cuando, como otras muchas empresas.

-¿Tiene información de cuándo se podrán firmar los convenios de la ETA para el Campus del Mar?

-Están muy avanzados y creo que en julio se podrán firmar.

-¿Qué pasos se darán después?

-En ese mismo acto se cede a la Universidad el edificio Faraday y la parcela de arriba mientras que el Consorcio se queda el Siemens en propiedad para rehabilitar. Estamos ahora estudiando su contenido con la Universidad y la Xunta para no repetirnos. La intención es crear una zona de emprendimiento e innovación vinculada al mar.

-¿Está justificado que Zona Franca recomprara esos terrenos a la Xunta cuando no se los había terminado de pagar?

-La Universidad nos propuso ser copromotores del Campus del Mar y participamos en el proyecto no para que unos paguen más y otros menos, sino porque de verdad queremos formar parte de la historia del centro de innovación del mar en Vigo y será un orgullo ayudar a crear conocimiento en torno a él. Nos lo pidió la Universidad y la forma de lograrlo era volver a entrar en la ETEA. Por 5,5 millones el Concello aceptó quedarse con una piscina y un pabellón, y Zona Franca por ese dinero se queda el corazón de la ETEA. La Xunta nos paga una parte de su deuda en dinero y otra en edificios mientras que el Concello aún no ha pagado nada. Eso sí lo doy por una inversión fallida. Esta es la etapa de la colaboración entre administraciones y atribuir el dinero público como propiedad privada de los dirigentes que lo gestionan es un error gravísimo. Este debate localista es absurdo.

-El Concello esgrime que no se ejecutaron los desarrollos urbanísticos previstos en el convenio.

-Lo pactaron así Abel Caballero y Emilio Pérez Touriño, habrá que preguntarle a ellos. Yo me encontré un convenio de 2009 que era un paripé sin cumplir por ninguna de las partes y trato de buscar soluciones. El Concello tenía oportunidad en 2015 de devolver los terrenos a Zona Franca para que la Xunta los expropiase y no lo hizo.

-¿Considera reenfocada la relación con el gobierno vigués?

--Ha sido un año muy duro. Con muy poco personal hemos tenido que reelaborar tres veces el presupuesto y estamos empezando a ejecutarlo. Pero deseo que se mantenga la normalidad institucional por el bien de los ciudadanos y del desarrollo de Vigo. Yo nunca retrasé ni dejé de ir a una reunión.

-¿Dará tiempo a ejecutar los 4 millones presupuestados este año para iniciar La Panificadora?

-Fue el Concello el que nos pidió incluir los 4 millones y si nos manda la factura pagamos mañana. No ha habido ningún contacto. Sabemos que se adjudicó el proyecto de rehabilitación y que se reservan al Consorcio dos pequeños espacios donde no cabría un centro de emprendimiento pero sí alguna opción de coworking y el centro de innovación del pan. Nos adaptaremos.

-¿Está asegurada la participación del Consorcio?

-Desde luego. Me parece un edificio espectacular y Zona Franca ha dicho por activa y por pasiva que apoya el proyecto y estoy esperando a que el Concello nos dé información porque no sabemos cuánto cuesta ni los plazos.

-¿Desarrollará la demandada Ciudad del Transporte?

-Es una propuesta necesaria y una obligación para el Consorcio que es el que convirtió a Vigo en un potente núcleo industrial. Por las mañanas veo a camiones que vienen del centro de Europa afeitándose en el retrovisor y en pleno siglo XXI hay que dotarlos de un espacio digno. Zona Franca lleva intentándolo desde 1993 y ahora a petición de los transportistas, de la CEP y del Círculo de Empresarios se ha retomado el proyecto. Tenemos las competencias, dinero y voluntad política para hacerlo. Si en Vigo no lo ha hecho la iniciativa privada es porque el suelo aquí es muy caro.

-¿Pedirá colaboración a la Consellería de Economía como reclama el Concello?

-La experiencia nos dice que es más fácil y ágil hacerlo en solitario. Sería un espacio pequeño de 50.000 a 100.000 m2 cerca de la AP-9 o la VG-20. Se lanzará una oferta pública de suelo y si el Concello tiene terrenos disponibles que nos los presente.