Los sondeos geotécnicos con sus correspondientes estudios posteriores realizados por la empresa constructora del primer subtramo de la futura autovía de O Morrazo [Copasa], por encargo de la Xunta, determinan que es viable modificar el proyecto previsto a la altura del túnel de Montealegre de forma que sea posible conservar el yacimiento castreño. Durante casi un año de excavaciones se sacaron a la luz dos áreas de este castro de la Edad del Hierro para su estudio. Con una inversión autonómica que sobrepasó el millón de euros, estos estudios pretendían analizar y catalogar las dos áreas que se verían afectadas por el desdoblamiento del Corredor.

Una vez conocida la riqueza de un castro clave en el sistema de poblados de la Edad del Hierro en la comarca, se originó un movimiento ciudadano de protesta exigiendo que no se afectase a este yacimiento, lo que requeriría una modificación en un proyecto cuyas obras ya estaban en avanzado estado de ejecución. El movimiento ciudadano comenzó con una recogida de firmas online y cristalizó en la Plataforma Salvemos O Castro, con representación de los distintos colectivos de la parroquia de Domaio. Los grupos políticos de la corporación se sumaron a las protestas públicas y demandaron con una moción que la Consellería de Infraestruturas sondease todas las opciones que permitiesen salvar este castro.

Según ha podido saber FARO, Infraestruturas ha convocado por carta a los alcaldes de la comarca a una reunión con la conselleira, Ethel Vázquez, el próximo viernes 9 de junio. La cita será en la propia comarca y los regidores conocerán entonces las opciones para salvar el castro.

La actuación proyectada de construir hacia la cara sur -hacia el lado del mar- un segundo falso túnel, permitía no cortar el tráfico durante su ejecución, pero dañaba estas dos áreas del yacimiento: en la cara este y la cara oeste de la ladera de Montealegre. La propuesta que se pondrá ahora sobre la mesa contempla una ampliación del túnel actual hacia ambas márgenes. Esto permitirá conservar intacta la parte del yacimiento que no se vio afectada por otras infraestructuras décadas atrás.

Eso sí, la modificación en el proyecto deberá contar con el visto bueno de los alcaldes, pues implicaría un cierre del Corredor que se puede prolongar durante varios meses. Esto obligaría a los conductores de la comarca a armarse de paciencia en sus desplazamientos a Vigo.

La adjudicación de las obras por parte de la Xunta no contemplaban cierres permanentes del Corredor por su tráfico intenso y los atascos que esto ocasionaría en las carreteras interiores de la comarca. Al final un imprevisto en los desmontes con dinamita obligó a un corte entre noviembre y febrero en los primeros 6 kilómetros del Corredor.

Ahora serán las administraciones las que decidan si compensa un cierre de la principal carretera de la comarca a cambio de conservar una joya arqueológica que fue uno de los primeros yacimientos de Galicia en ser excavado siguiendo una metodología científica, a comienzos del siglo XX.

Entre las propuestas que tuvo la Xunta sobre la mesa para salvar el castro nunca se contempló desdoblar el Corredor en todos sus tramos excepto en el túnel de Montealegre, como llegó a proponer la Plataforma, al considerarse que implicaría un peligro para los conductores.

Los sondeos geotécnicos realizados a finales de marzo por la empresa constructora garantizan que el túnel actual se puede ampliar y que soportará el peso del monte sin peligro para los usuarios de la carretera.