En seis meses, las termitas pueden devorarse un edificio entero, asegura Fidel Bergantiños, el técnico de la empresa "Nogal", de A Coruña, que ayer se desplazó a Cangas para fumigar la Casa da Xuventude. Una colonia de termitas se había comido el marco de una puerta en la planta baja del inmueble y si no se actuaba, toda la madera del edifico iba camino de ser engullida por estos insectos que se alimentan de la celulosa de la madera y que físicamente son como las hormigas peor de color blanco.

El técnico de la empresa asegura que fumigó por entre unas grietas de la pared por donde la trabajadora del Concello le informó que vio como se metían las termitas. Ayer quedó todo sellado y la Casa da Xuventude seguirá hoy cerrada por el plazo de seguridad que aconseja la utilización del producto para combatir esta plaga.

Sobre su origen, no se puede precisar. La Casa da Xuventude es un edifico antiguo que se encuentra en el casco histórico y tanto pudieron llegar a este inmueble procedente de otro como también haberse trasladado desde éste a otro. Enfrente de la Casa da Xuventude se encuentra la excolegiata, que es un bien protegido como también otros inmuebles del entorno. El casco histórico de Cangas no se salva de ser presa de las termitas, aunque ayer el técnico aseguraba que en lo que respecta a la Casa da Xuventude, había quedado ya tratada contra este insecto. La termita se diferencia físicamente de la polilla de la carcoma en que es como una hormiga, pero blanca, mientras que la polilla es un bicho redondo negro, que hace agujeros en la madera por donde escupe polvillo. En el caso de las termitas, el insecto deja un rastro de baba. Fue precisamente esta baba, bordeando el marco de la puerta, la que alertó de su presencia en la Casa da Xuventude.

La empresa reconoce que en la actualidad no hay un gran problema de termitas en Galicia, ya que la amdera ahora viene tratada, aunque sí se dan casos en entorno antiguos como ha sido éste.