El Concello de Moaña adjudicó, en la junta de gobierno local de ayer, las obras para conectar a la red general de saneamiento las viviendas de profesores del colegio público Reibón, con el objetivo de poner fin a uno de los puntos de vertido de aguas sin depurar que todavía quedan en Moaña.
En este caso, la falta de conexión con el saneamiento hacía que históricamente esas viviendas vertiesen las aguas residuales al río de A Fraga.
Aunque este hecho nunca influyó de forma notable en los análisis de aguas de la playa de A Xunqueira, lo cierto es que Augas de Galicia amenazó a lo largo del pasado año con sancionar al Concello. "Tivemos que comprometernos a reservar unha partida orzamentaria para solventar este problema, por iso a incluimos nos orzamentos de 2017", explica el concejal de Medio Ambiente y Playas, Odilo Barreiro.
El Concello espera que las obras comiencen lo antes posible y las nuevas canalizaciones queden listas en unos 20 días. La inversión implica un gasto de 17.000 euros "pero ao tratarse dunha obra de entidade menor, preferimos asumila con recursos propios para que os compromisos de Aqualia se destinen a traballos máis costosos", explica Barreiro.
Las viviendas en cuestión son más de 10 y fue necesario obtener una autorización de Costas del Estado para actuar.
El trabajo exigirá un retranqueo del colector de aguas, ejecutar las zanjas pertinentes y acometer la canalización hacia la red de saneamiento con tuberías de PVC de 315 milímetros.
Prácticamente todas las viviendas oficiales para profesores están ocupadas, según explican desde el Concello.
Rialdarca
Además de por estos vertidos, estas viviendas fueron objeto de una propuesta del concejal de XM, Javier Carro, que pidió que el Concello reclamase su cesión a la administración local para poder darle un uso social. Finalmente su demanda no prosperó.
Estos trabajos se sumarán a las recientes catas para tratar de acabar con otro punto de vertidos en los cursos fluviales de Moaña, se trata del río Rialdarca, en donde cada cierto tiempo aparecen manchas de combustible sin que de momento se sepa la procedencia de estos líquidos sin depurar.
En principio, más allá de los vertidos de las casas de profesores, no se registran otros puntos de agua sucia en ningún otro tramo del río de A Fraga.
