Decenas de niños y niñas tomaron ayer el renovado parque infantil de Rodeira, junto al cuartel de la Guardia Civil, abierto por la mañana por el alcalde y la concejala de Obras e Servizos -Xosé Manuel Pazos y Mercedes Giráldez- tras los trabajos realizados por la empresa HPC por encargo de la Diputación, que invirtió 50.518 euros en esta actuación a través del Plan de Concellos. La leve mejora ofertada por la adjudicataria se empleó en material. La intervención se justificó en el mal estado de las instalaciones existentes, con elementos desgastados o inseguros debido al paso del tiempo o el vandalismo y que suponían riesgo de lesión para los usuarios, así como la necesidad de adaptarlos a la normativa existente en materia de seguridad.
Además de los elementos habituales en este tipo de parques, en el de Avenida de Ourense se incluye una pequeña montaña de escalada para los niños y niñas más pequeños, además de artilugios de equilibrio, columpios o tobogán. También se acondicionó en entorno y está previsto instalar algún tipo de barrera o prohibición para evitar que los coches aparquen junto al vallado, según señalaron los representantes municipales. La afluencia masiva de personas a este parque debido a su carácter urbano y muy transitado, así como su cercanía a la playa de Rodeira, también sirvió para detectar algunas carencias, como la escasa iluminación que dificulta el disfrute al caer la noche. Las familias solicitan que se corrija esta deficiencia.
