La Guardia Civil detuvo a un vecino de Cangas con 20 dosis de cocaína en un bar de Aldán. En el vehículo que tenía estacionado en las inmediaciones se le intervinieron otras 150 dosis de la misma sustancia.

Esta detención se enmarca dentro de las actuaciones que se están llevando a cabo en la provincia de Pontevedra para dar una respuesta policial al tráfico minorista y consumo de drogas en zonas de ocio. El pasado sábado se llevaron a cabo varias inspecciones en distintos bares y cafeterías de la comarca de O Morrazo.

18 identificaciones

Una de estas inspecciones se realizó en un bar de la parroquia de Aldán, donde la Guardia Civil procedió a la detención de un cliente G.C.I, de 42 años, cuando llevaba consigo 20 dosis de cocaína. Al inspeccionar su vehículo, los agentes encontraron otras 150 todos de la misma sustancia, que también fueron intervenidas y 80 euros en efectivo. Según indicaron fuentes próximas a la investigación, el detenido tenía antecedentes por tráfico a pequeña escala de estupefacientes.

Además de esta actuación de tipo pena, que concluyó con la detención del cliente acusado de un delito contra la salud pública, la Guardia Civil identificó en el mismo establecimiento a otras 18 personas y se formularon cinco denuncias de tipo administrativo: tres de ellas por tenencia de distintas sustancias estupefacientes en menor cantidad (cocaína y marihuana), una por falta de respecto a los agentes de la autoridad en el ejercicio de sus funciones y la quinta por tenencia de una arma prohibida, una navaja que simulaba un tarjeta, que supuestamente se utilizaba para cortar la cocaína.

Inspección en Vilaboa

En otra de las inspecciones realizadas de madrugada, la Guardia Civil identificó a 9 personas en los exteriores de un bar, en el municipio de Vilaboa y se formularon tres actas administrativas por tenencia de cocaína.

Este tipo de actuaciones policiales proseguirán en los próximos días en todo el Morrazo.