La empresa Aqualia y el Concello de Bueu organizaron ayer una visita guiada a las instalaciones de la depuradora de Cabalo, donde se tratan las aguas residuales del municipio. Fue un recorrido didáctico, en el que el responsable del control de las depuradoras de Aqualia en Galicia, explicó a los asistentes cómo funcionan las instalaciones y garantizó la calidad del servicio. Aseguró que una vez tratadas las aguas que se vierten al mar están en "perfectas condiciones" y puso como ejemplo los informes y auditorías que realiza Augas de Galicia.

La visita de ayer era una petición que había planteado hace tiempo el colectivo ecologista Anduxía. En el recorrido estuvieron presentes miembros del gobierno local, como los ediles de Medio Ambiente y de Servizos, Manuel Otero y Fidel Castro; responsables de la empresa en Bueu e integrantes de Anduxía. El encargado del control de las estaciones depuradoras explicó a lo largo de casi dos horas cómo se tratan las aguas residuales una vez que entran en la depuradora, el proceso de criba para separar los sólidos y las grasas y su tratamiento en los estanques. Desde Aqualia insistieron en las "perfectas condiciones" del agua que se vierte al mar una vez completada la depuración. Durante el recorrido se plantearon numerosas cuestiones, entre ellas la puesta en marcha del sistema de desinfección con rayos ultravioleta. Este sistema está instalado desde hace años, pero Concello y empresa no se ponen de acuerdo sobre quien debe asumir el coste que implica su mantenimiento.