Vecinos del barrio de Menduíña, en la parroquia canguesa de Aldán, alertan de que alguien está arrojando al monte basura de todo tipo en el entorno de la concurrida fuente de San Amaro. El entorno de este punto de recogida de agua se ha convertido en un vertedero incontrolado de escombros, muebles o restos de uralitas.

Algunos de los vecinos afectados se dirigieron en varias ocasiones al Concello sin que de momento se acudiese a la zona a limpiar el terreno y a tratar de identificar a los causantes de los vertidos.

El material arrojado de forma ilegal se apila sobre parte del curso de agua de desemboca en la fuente, de ahí que los vecinos urjan la limpieza.

Explican que el vertedero incontrolado se remonta a hace unos 8 meses. Primero empezaron a aparecer restos de poda. Poco a poco arrojaron escombros, cristales, uralitas, maderas y plásticos u otro tipo de residuos. En pocos meses la situación es alarmante y exigen que el Concello actúe lo antes posible, pues su estado actual podría animar a más personas a utilizar este monte como vertedero.

Barra

No es el único vertedero ilegal denunciado recientemente en el municipio cangués. En los últimos días se alertó de un vertido de escombros en el entorno de las playas de Barra y Viñó, en O Hío, justo en las lindes de la Red Natura.

Además del daño medioambiental, estas prácticas suponen un coste económico para todos los vecinos, pues el Concello debe hacerse cargo de la recogida y tratamiento de estos residuos.