Solo una modificación puntual de las Normas Subsidiarias de Planeamiento por las que se rige en la actualidad el urbanismo de Cangas o la aprobación del nuevo Plan Xeral salvarían la licencia que tiene solicitada la firma vasca Eroski, para instalar su segundo centro comercial en Cangas. De nuevo, la licencia se encontraría con uno de los problemas que tuvo Mercadona y que supuso la anulación de la licencia municipal que le había concedido el Concello de Cangas cuando gobernaba el PP: la limitación de plazas de aparcamiento para los usos comerciales de segunda categoría (20 plazas vinculadas al centro como máximo).

El concejal de Urbanismo del Concello de Cangas, Mariano Abalo, reconocía ayer que las normas actuales hacen imposible que prosperen este tipo de solicitud de licencias. Afirma que es una cuestión que hay que estudiar con la Dirección Xeral de Urbanismo para ver qué fórmula se elige, si sería más conveniente una modificación puntual porque se tramitaría de forma rápida o a través del Plan Xeral, que aún está en periodo de gestación.

Mariano Abalo aprovecha la oportunidad para contestar al líder del PP en Cangas, José Enrique Sotelo, que puso en tela de juicio el comportamiento de Urbanismo en el proceso judicial que supuso la anulación de la licencia a Mercadona. El concejal de Urbanismo afirma que mantener, como hizo Sotelo, que el gobierno local se alegraba de esta sentencia era reducir las cosas a lo absurdo. Asegura que declaraciones como las del portavoz del PP no hacen otra cosa más que sembrar sombras. "Pretenden crear una cortina de fume, guerra absurdas para tapar unha forma de facer política. Nos non queremos polemizar coa sentenza de Mercadona. Hai que agradecerlle tamén a empresa Amgecabe que no comenzase as obras. Reuninme cos seus representantes ao principio do mandato para explicarlles que o inicio das obras, se despois a sentenza era desfavorable _como foi_ traería aparellado uns costes adicionais para o Concello de Cangas, que tería que responder patrimonialmente".

Mariano Abalo contesta a Sotelo con que hay que ser muy minucioso en materia de Urbanismo, para que después no ocurran cosas como esta anulación de sentencia. También dice, respecto a la adjudicación del Plan Xeral de Cangas, que se realizará con todos los informes técnicos, que no hay ningún afán de ocultar nada, al contrario, que se ofrece diálogo y consenso.