Marineros y usuarios del Puerto de Cangas muestran su malestar por el comportamiento de uno de los miembros de la Policía Portuaria. Desde que trabaja en la zona aumentaron las multas por estacionamiento indebido y por el atraque de embarcaciones auxiliares.
Son sanciones de 200 euros como mínimo que solo tienen rebaja por pronto pago. La actuación del citado policía portuario también se centra en las inspecciones a las casetas de los marineros, que provocó no pocas quejas y reclamaciones por escrito. Cuentan los marineros que los sancionaba por tener en la caseta calentadores eléctricos, que utilizan para calentar el agua con el que se van duchar después de trabajar. Los marineros se vieron obligados a presentar escritos ante la Xunta de Galicia tras encontrarse con la sorpresa de las multas. Por cierto, que también en este año se constató que muchos marineros optaron por dejar las nuevas y famosas casetas, por las que pagan 1.200 euros al año y pasarse a las viejas. El citado policía portuario también sanciona, según señalan, a los marineros que tienen las redes fuera de sus casetas. Es conocido porque desde primera hora se le ve sacando fotos a todos: a coches a embarcaciones, a casetas, y no hace mucho a una furgoneta del Concello de Cangas, que actuaba en la zona, a pesar de comunicarle uno de los operarios municipales que se trataba de un vehículo municipal. Los marineros y usuarios del puerto consideran que hay un excesivo celo de su trabajo que está provocando un mal ambiente. Afirma que actuaciones que se hicieron durante toda la vida en el puerto de Cangas, fueron prohibidas de forma tajante sin mediar con los marineros.
Destaca el hecho de que poco a poco se abandonen las nuevas casetas de los marineros con ese diseño tan premiado y que genera tanto descontento en Cangas, por el ruido que hace al pegar el viento entre sus hierros. Los profesionales consideran que los 1.200 euros al año es una cantidad que en estos momentos no se puede soportar.
