El arqueólogo Miguel Vidal reconoce que las excavaciones en yacimientos que se verán afectadas por obras como las carreteras son comunes en los últimos años. Señala que el objetivo pasa por "recuperar lo máximo posible y documentar todo lo que encontremos para reconstruir la forma de vida del castro". Define esta tarea como "un certificado de defunción de las dos áreas del yacimiento que estamos excavando".

Apunta a la importancia que tiene el castro de Montealegre, que en los años 20 del siglo XX "fue excavado en una zona puntual, convirtiéndose en uno de los primeros de Galicia en ser tratado con metodología científica". En 2004, antes de la construcción inicial del Corredor, también se había realizado otra intervención parcial.