La concejala de Servizos Sociais de Moaña, María Ortega, regresó de su expedición a Mozambique para compartir con responsables políticas locales experiencias en favor de la igualdad y medidas para favorecer el empoderamiento de la mujer en este país africano. Durante una semana acudió junto a otras tres ediles gallegas y una responsable del Fondo Galego de Cooperación e Solidariedade al país africano.
La edil entiende que la participación de las representantes de concellos gallegos en unas jornadas organizadas por la Rede Moçambicana de Mulheres Autarcas fue positiva. "Creo que fixemos que algunhas mensaxes callaran entre os asistentes. Ven Europa como un mundo aparte pero lle dixemos que en todo o mundo hai sociedades patriarcais. Que só estamos en estadios distintos no traballo de romper con esta cultura", apunta la moañesa. Señala también que las gallegas hicieron hincapié en sus intervenciones en que cada cultura "debe atopar o seu propio camiño para chegar a ese obxectivo", incidiendo en que las mujeres deben tener derecho a decidir su rol en la sociedad en un país "no que case todo o mundo concibe o rol de nai e coidado do fogar como o único".
A lo largo de una semana María Ortega y sus compañeras de expedición -Ana Abelleira, Ana Gundín y Emilia Somoza, ediles de Lugo, San Sadurniño y Verín- visitaron tanto la capital de Mozambique, Maputo, como Boane, en la provincia de Mandlakaze. Se trata de la única provincia con dos presidentas al frente del Consello Municipal y de la Asemblea Municipal.
Junto a la alcaldesa de la localidad, María Helena Correia, comprobaron de primera mano las medidas adoptadas para ayudar a las mujeres en materia de salud o de conciliación. También se trabaja para lograr el matrimonio de las mozambicanas con los padres de sus hijos, pues en ciertas áreas es común que los varones tengan hijos con distintas mujeres "e nunha sociedade na que as mulleres aínda dependen para moitas cousas dos homes, se teñen fillos e non están casadas perden dereitos como axudas económicas en caso de que o pai dos nenos falezca". Eso sí, en sus discursos las concejalas gallegas incidieron en aspectos como la participación social, "tomando decisións en colaboracións coa cidadanía", a la hora de programar políticas de igualdad. Un aspecto en el que sí percibieron carencias.
Asimismo, comprobaron el proyecto que el Fondo Galego de Cooperación mantiene en Boane con la Fundaçao Encontro. Las sensaciones no pudieron ser mejores. "Traballan moi ben colaborando coas comunidades locais para chegar a todos os poboados. Fan labor porta a porta con activistas para que as mulleres acudan aos servizos desta Fundación", apunta Ortega. Y es que el proyecto del Fondo Galego cuenta con un orfanato, una escuela y un servicio de atención médica y seguridad para las mujeres durante el periodo del preparto, el parto y el postparto. También realizan un seguimiento de la alimentación de los niños.
