Saleta Piñeiro, con una camiseta contra el cáncer de mama. // G. Núñez

"El vídeo tuvo una repercusión increíble, y eso que solo empezó como una broma compartiéndolo entre la familia y los amigos. Algunos medios deportivos me comparan con Cristiano Ronaldo, pero yo me quedo con Iago Aspas, que es vecino y lo conozco", explica con humor la camarera del Bar Pósito, Saleta Piñeiro.

Esta moañesa de 28 años ha dado el salto a la mayor parte de los medios digitales de España, con grandes cabeceras deportivas de la capital incluidas, por su brillante taconazo a una taza que se caía y que acabó colando en un fregadero. El asombro entre los clientes fue total. El taconazo con una puntería envidiable fue de espaldas al propio fregadero y se produjo hace un par de semanas.

Toda la escena quedó grabada por una cámara de seguridad del establecimiento y rápidamente fue compartida por las redes sociales. La camarera se confiesa abrumada con la repercusión. "No paro de recibir llamadas y los clientes ya me piden que les pase las cañas de tacón", apunta entre risas. De todas formas se toma el revuelo con filosofía y recuerda su experiencia como futbolista. "Jugué en el Domaio femenino y en el Montajes Darbo de fútbol sala. También entrené a niños en actividades extraescolares, aunque por falta de tiempo ya no juego al fútbol", señala.

El famoso taconazo de Saleta Piñeiro // FARO

De todas formas, no oculta que su espectacular taconazo fue una cuestión de suerte. "Fue un acto reflejo. Vi que caía la taza y le di de tacón. Tuve suerte, porque si le doy más fuerte igual acabo dañando a algún cliente", reconoce.

De no ser por la cámara de seguridad, seguro que nadie se cree semejante despliegue de coordinación y reflejos.

Se declara celtista, aunque tampoco le disgustan las comparaciones con CR7, "porque algo también me gusta el Real Madrid".

No oculta tampoco la sorpresa de verse en páginas deportivas a las que le cuesta acceder en muchos casos a deportistas que practican disciplinas minoritarias.

De momento, y hasta que la viralidad de internet deje de hacer efecto, los reflejos de Saleta Piñeiro se han convertido en un atractivo más de este bar del centro de Moaña. No se descarta que le pidan exhibir sus dotes futbolísticas ante la clientela.