La licencia para el derribo de la nave incendiada de Fandiscota, en Domaio, tendrá que esperar una semana más. La junta de gobierno de Moaña tenía previsto otorgar ayer la licencia municipal de demolición, aunque el concejal de Urbanismo, Odilo Barreiro, asegura que tendrá que esperar a la junta de gobierno del próximo lunes, debido a que no estaba rematado el informe urbanístico.

Todo apunta a que el informe será favorable a una demolición que tiene un presupuesto que ronda los 150.000 euros, aunque el retraso en la concesión de la licencia choca con la agilidad con la que la empresa reactivó la planta de frigorífica y de envasado de pesca congelada, sólo una semana después del incendio que arrasó la mitad de la macroplanta de Domaio.

De todas formas, la empresa ya está trabajando en la retirada de las planchas metálicas que se destruyeron en el fuego, que se declaró en la tarde del pasado 9 de mayo debido al cortocircuito en una máquina.

La empresa ya anunció su intención de reconstruir la planta frigorífica con un nuevo edificio y que se estaba en conversaciones con un ingeniero industrial. Del proyecto de la nueva planta no ha tarscendido todavía nada, en el Concellol tampoco se ha solicitado información urbanística al respecto, aunque el concejal de Urbanismo ya había manifestado la necesidad de que la Xunta agilizara la aprobación del texto refundido que presentara el Concello para concluir la aprobación del Plan Xeral de Ordenación Municpal (PXOM) que se aprobó definitivamente en 2013, aunque de forma parcial. El terreno de la nave es zona de autoridad portuaria de Vigo, aunque carece de plan especial.