Una resolución de la Alcaldía será el último trámite administrativo del Concello de Cangas antes de empezar a retirar las vallas y carteles de obras que ya han sido ejecutadas o que están paralizadas y sin fecha de continuidad, en algunos casos porque sus promotores han quebrado o no tienen intenciones de concretar el proyecto. La medida afecta a parcelas privadas -como es el caso de la mercantil Vicalia S.L. en Avenida de Ourense- y públicas -como varias de la Xunta y la Diputación en la alameda-, pues el gobierno tripartito entiende que las vallas informativas no pueden ocupar un espacio a perpetuidad, y menos si obstaculizan o suponen un peligro para la seguridad. Solo los carteles privados o institucionales que estén en fase de ejecución se mantendrán en pie, explica la concejala de Medio Ambiente, Tania Castro, que advierte que estas instalaciones "desfasadas" e innecesarias deterioran la imagen urbana.

La tarea de encargará al personal de refuerzo de la brigada de obras y servicios que han empezado su contrato esta mes y a los que se encargarán también otras tareas. Entre las más inmediatas, explica la edil, está el desmantelamiento de la torreta de vigilancia de la playa de Rodeira, que ya no utilizan los socorristas debido a su deterioro y dificultad de acceso, pero sí algunos espontáneos, con el consiguiente peligro de caídas. "Xa non pinta nada ahí, e o que procede é retirala", insiste Castro.

En los planes municipales de trabajo también figura, a corto plazo, el desbroce de las fincas del pazo de Vistalegre y la llamada "finca do conde" o "bosque encantado", de Aldán, sobre las que existen informes municipales de falta de salubridad y peligro de incendio. El Concello ha notificado a sus propietarios que, tras no responder a sus requerimientos, los limpiará de oficio y les pasará luego la factura con los gastos, aunque reconoce escasas posibilidades de cobro debido a la situación jurídico-financiera de sus titulares. En el caso de Promalar, porque la empresa de Juan Lago está en fase de liquidación concursal, y con respecto al pazo de Vistalegre, porque la familia propietaria no acaba de ponerse de acuerdo sobre las condiciones de reparto de la herencia.