Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Seguridad y vallas para los Morones

Guardia Civil y Policía repiten el operativo para controlar el entorno del juzgado

La Policía y la brigada de obras acordonaron la parte lateral del juzgado por donde entran los furgones. // Gonzalo Núñez

La Policía Local de Cangas estableció ayer por la noche un amplio dispositivo para controlar los accesos al juzgado de la localidad, en los que prestarán hoy declaración Marino Giménez, (hermano de Sinaí Giménez, autoproclamado príncipe de los gitanos gallegos) y su mujer. Ambos fueron detenidos ayer por la mañana en su casa de Tomiño, donde se llevó a cabo un registro, dentro de la denominada "Operación Vida". Marino Giménez estaba pendiente de un juicio por tráfico de drogas, pero la detención se produce dentro de la operación que la Guardia Civil puso en marcha contra el clan de los morones, a los que se le acusa de extorsión en los mercadillos de la provincia de Pontevedra. Hace dos semanas comparecieron ante el titular del juzgado número 3 de Cangas el propio Sinaí Giménez y sus otros dos hermanos Saúl y Juan Pablo, que tras 12 horas en los juzgados fueron trasladados a la prisión de A Lama.

Al día siguiente declaró el patriarca del clan, Olegario Giménez, al que el juez también decidió ingresar en prisión tras prestar declaración y eso que acudía a hacerlo de forma voluntaria, con el fin de colaborar con la justicia, según había dicho el día anterior su abogado. Fue trasladado de Cangas a Povisa en una ambulancia y desde allí a una unidad penitenciaria de un hospital de Pontevedra.

La brigada de Obras del Concello de Cangas en colaboración con la Policía Local colocará las vallas protectoras con el propósito de controlar los accesos a los juzgados. Se habilitará una zona en la avenida de Galicia para el aparcamiento de los vehículos de las autoridades judiciales, fiscalía, letrados, Guardia Civil y Policía Local. A partir de las 07.00 horas se comenzará a realizar el control de los vehículos en la avenida de Galicia y está previsto que entre las 9 y las 10.00 horas lleguen los detenidos a prestar declaración.

Medio centenar de miembros de la Guardia Civil se ocuparán de la seguridad en la zona, mientras que la Policía Local controlará los accesos al juzgado. Volverán a instalarse controles en las rotondas de acceso a Cangas y los efectivos de laPolicía Local estarán a disposición del operativo que monta la Subdelegación del Gobierno.

El cordón policial tratará también de impedir que los familiares de los detenidos se acerquen al furgón o furgones donde vendrán los detenidos.

No se espera que sea una jornada tan larga como la de hace quince días ni tampoco que las de ayer sean las últimas detenciones relacionadas con este caso. El juez que lleva el caso comentó la semana pasada que el caso seguía abierto y que por los juzgados de Cangas tendrían que pasar no solo detenidos, sino también testigos relacionados con el caso.

Compartir el artículo

stats