La empresa Únika, contratada por la Diputación de Pontevedra, para realizar las obras del campo de fútbol de Morrazo, retomó ayer las obras, tras más de quince días en los que la junta directiva del Club Deportivo Alondras se preguntaba por qué estaban paradas y un demoledor informe del estado de las mismas, donde se daba cuenta al alcalde de los problemas que se habían detectado. De hecho, el regidor local, Xosé Manuel Pazos, no descartó un viaje a la Diputación de Pontevedra para aclarar determinadas cuestiones, por ejemplo que las gradas carezcan de asientos, algo que sorprendió al club y a los aficionados.

Ayer fue necesario cortar otra vez la carretera que conduce al Campo de Fútbol de O Morrazo por presencia de maquinaria pesada en la misma. De nuevo la Policía Local de Cangas estuvo pendiente del operativo.

Lo que, de momento, no se desvela es si todas las deficiencias detectadas en el informe que llegó a manos de la Alcaldía se van a reparar. La Diputación de Pontevedra marcó un plazo de finalización de los trabajos que concluye en diciembre de 2016. Lo que se teme es que el alquiler de las casetas habilitadas para vestuarios vaya en detrimento de los trabajos de reforma.

Estaba previsto que técnicos de la Diputación de Pontevedra inspeccionaran los trabajos realizados hasta la fecha.

No se descarta, tampoco, que el alcalde de Cangas mantenga en su agenda una reunión con la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, con el fin de apurar los trabajos y conversar sobre las deficiencias detectadas en el citado informe, además de la instalación de los asientos de las gradas.