El pleno de Cangas aprueba por mayoría y solo una abstención el texto modificado de la ley del Área

Pero el resultado de la votación es engañoso. Esta amplia mayoría es tan solo aparente y no exenta de críticas entre miembros del actual gobierno tripartito (ACE, ASPUM y BNG) y el Partido Popular. El gobierno no quería "pelea" en este asunto, pero no la rehuyó cuando la propusieron los populares a través de su portavoz, José Enrique Sotelo. Xosé Manuel Pazos había comenzado su intervención alabando el consenso entre los partidos políticos de los distintos municipio, el hecho de que iba a ser una área metropolitana que iba a permitir trabajar y prestar mejores y más servicios a la ciudadanía. También recordó que una de las primeras medidas que iba tomar el Área era el de elaborar un nuevo transporte metropolitano, donde esté Vigo.

Pero el PP no iba a dejar pasar la oportunidad para recordar que los que hoy ocupan los asientos de la oposición habían mantenido antes posturas contrarias al Área. Rafael Soliño recordó frases como que no se iba a permitir que desde Vigo se impusiera el urbanismo de Cangas, dichas por el propio regidor. De hecho, Pazos aclaró que esa postura se mantuvo cuando el PP no quería consensuar la ley, cuando tenía 9 alcaldes de los 14 e imponía sus condiciones, no ahora que solo tiene cuatro y hubo posibilidad para un consenso, que se logró, respetando los intereses de los concellos. Soliño recriminó que el alcalde de Vigo, Abel Caballero, realizara una propuesta sobre la capitalidad de la provincia. Pazos contestó que estaba equivocado, que lo que proponía Abel Caballero era que Vigo tuviera las infraestructuras y el trato de una capitalidad de provincia. Soliño exigió la entrada ya de Vigo en el transporte metropolitano, porque era un menosprecio para Cangas y una carga económica para los demás concellos. El alcalde recordó que había un compromiso de Vigo de hacerlo antes de que se aprobara en el Parlamento de Galicia la ley.

Intervinieron también los portavoces de los demás grupos. Alfredo Iglesias (PSOE) para hablar de oportunidad única, José Luis Gestido (Cangas Decide) para explicar que su abstención obedece a la necesidad de analizar con más detenimiento el texto; Mariano Abalo (ACE) para afirmar que si el PP habla de ser escépticos, ACE podía serlo más, ya que "nos non redactamos o fundamental". Afirma que esto obliga al Concello de Cangas a n o abandonar a la Mancomunidad de Municipios y será una forma de que Cangas deje de ser la cenicienta de la provincia. Mercedes Giráldez (BNG) alabó el consenso y aseguró que en el Parlamento de Galicia su grupo presentaría propuestas. Mientras tanto, el portavoz de Asemblea pola Unidade, Tomás Hermelo, manifestó que el texto se podía aprobar inicialmente, porque además siempre quedaba la opción de salirse de ella si la entidad no funcionaba por alguna razón.

Hubo un duro enfrentamiento dialéctico entre el alcalde y el portavoz del PP. Rafael Soliño acusó al alcalde de ser "un palmero" del regidor vigués, Abel Caballero, algo que Xosé Manuel Pazos consideró que era un insulto. "Eres un faltón" r explicó el regidor, que insistió que él, como el alcalde de Redondela, que es del PP, apoyan el Área porque defienden los intereses de sus respectivos concellos. Recordó la imposición que la Xunta quería hacer en el Área Metropolitana de Vigo cuando tenía mayoría de alcaldes y por fin la Xunta vio la luz, como San Pablo cuando cayó del caballo. "O que non podiamos facer antes era aprobar un texto totalmente antidemocrático, donde non había voto ponderado, como agora.

Las intervenciones dejan patente que hay diferencias incluso entre aquellos que aplauden el consenso y alguna que otra contradicción, que veremos como se resuelve con el tiempo: Diputación, Mancomunidad, Área.