La renovación de los estatutos de la Mancomunidade do Morrazo para dotarla de más contenidos -más allá del servicio de la basura- y convertirla en un ente más ágil y útil parece que al fin está en marcha. El hecho de que en los actuales estatutos aún aparezca Marín, que abandonó el organismo hace ya 15 años, es un buen ejemplo acerca de lo obsoletos que se han quedado. El actual presidente mancomunado y alcalde de Bueu, Félix Juncal, presentó ayer a sus homólogos de Cangas y Moaña un borrador de nuevos estatutos en el que se incluyen importantes novedades. El documento concreta cuáles son las nuevas competencias y apunta cambios importantes en la organización y toma de decisiones. Entre esas novedades destaca la creación de un consello de alcaldes o la introducción del voto ponderado en las asambleas.
La propuesta inicia ahora una fase de consultas para ser sometida a aprobación inicial en la próxima asamblea mancomunada, que podría ser a lo largo del mes de marzo. Hasta la fecha este órgano está compuesto por los 55 concejales que forman parte de las corporaciones de Cangas, Moaña y Bueu, lo que habitualmente convierte la convocatoria en un trámite largo y farragoso. En caso de que la propuesta de estatutos salga adelante tal como está planteada la asamblea pasaría a estar integrada por un concejal de cada uno de los grupos políticos con representación en cada corporación y se aplicará un sistema de voto ponderado. Esto es, el voto de cada representante valdrá tanto como concejales tenga su grupo en el municipio al que represente. "A asemblea é un organo elefantiásico, que costa moito mover e convocar, e está ben axilizar o seu funcionamento. Sempre e cando non se lle retiren competencias nin representatividade a cada partido", defiende desde Cangas Xosé Manuel Pazos.
El gran caballo de batalla de la Mancomunidade desde hace años es quitarse el sambenito de que es la administración "de la basura", que en la actualidad es el único servicio que gestiona. El borrador de nuevos estatutos mantiene entre sus fines los objetivos iniciales -potenciar la idea de comarca, la promoción cultural y artística...-, pero ñade nuevas competencias para que esa idea de comarca no se quede solo sobre el papel. Así se plantea gestionar de manera conjunta el servicio de limpieza de playas o la reparación y desbroce de viales. La apuesta más ambiciosa es la gestión "mancomunada" de servicios municipales como las escuelas de música y el conservatorio, la unidad asistencial de drogodepencias o establecer convenios para la recogida de animales abandonados o para para colaborar con entidades de ámbito comarcal, como el caso de Afamo. "A proposta vai na liña do que falamos nos últimos meses para facer da Mancomunidad un órgano máis útil para os veciños e os Concello e que non sexa só para a recollida do lixo", sostiene la regidora moañesa, Leticia Santos.
El borrador incorpora la creación de un nuevo órgano que se denomina como Consello de Alcaldes. Según Félix Juncal este consejo se podrá reunir a instancias de la presidencia para decidir sobre los asuntos que le sean delegados -ya sea por la propia presidencia o la junta de gobierno-, así como para "impulsar ou propoñer decisións de especial interese ou cando a trascendencia dun asunto de interese supramunicipal aconselle o sue coñecemento e debate" antes de elevar una propuesta a la junta de gobierno o a la asamblea.
